Si otros años los nazarenos miraban al cielo, con el ruego de que la lluvia no impidiese la salida a la calle de su procesión, este año lo hacen a los datos de la evolución de la pandemia de coronavirus, que ha segado ya la vida de casi 800 personas en la Región.
La incidencia de la tercera ola hace previsible que este año no se produzcan, al igual que pasó ya en 2020, desfiles sobre la Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo. Cofrades murcianos consultados por esta redacción admiten que la opción de suspender las procesiones es más que probable, aunque dejan claro que «se suspenderían los desfiles, en ningún caso la Semana Santa», que es un periodo de recogimiento, fe y oración.
Andrés Marín, secretario general del Cabildo de Cofradías de Murcia, explicó a LA OPINIÓN que la junta directiva del Cabildo tenía previsto reunirse ayer mismo, pero el encuentro ha sido aplazado después del anuncio del presidente López Miras de prohibir toda interacción social.
«No lo hemos suspendido: lo hemos aplazado, debido a lo que estamos viendo», comenta Marín. La reunión, por tanto, se aplaza a la semana que viene, concretamente al lunes día 18, y se llevará a cabo de forma telemática.
En el encuentro se abordará qué va a pasar con los desfiles de este año, «si se suspenden o no», ya que, en palabras del secretario del Cabildo, «hay que preparar muchísimo» para sacar una procesión a la calle.
Apuntó, no obstante, que los nazarenos también esperan que «toda la Diócesis decida» y el obispo anuncie que, un año más, no habrá procesiones en ningún municipio de la Región.
Por otro lado, Francisco Pagán, Hermano Mayor Marrajo y anterior presidente de la Junta de Cofradías de la Semana Santa de Cartagena, indicó ayer a esta redacción que los cofrades del municipio mantendrán una reunión en unos días y previsiblemente se pronunciarán ya sobre qué hacer con los desfiles.
Pagán admitió que «la cosa no pinta nada bien» y adelantó que el jueves día 21 de enero habrá un encuentro en el que se abordará la cuestión.
Asimismo, comentó que la Cofradía Marraja tendrá también su propia reunión, donde los hermanos debatirán sobre qué pasará este año con las procesiones.
En lugares limítrofes ya se está confirmando lo que los cofrades temen: las procesiones de Semana Santa de 2021 en toda la Diócesis de Orihuela-Alicante han quedado suspendidas por la situación de la pandemia del coronavirus, corroboraba su obispo.
Las Fiestas de Primavera también peligran. La Agrupación Sardinera ya asume que este año tampoco podrá haber gran desfile del Entierro, y los huertanos planean un 'Bando estático'.
San Fulgencio, al altar mayor
La urna que contiene las reliquias de San Fulgencio se colocará este año al pie del altar mayor de la Catedral para facilitar que los fieles puedan admirarla de cerca y orar al patrón de la Diócesis de Cartagena, informaron fuentes del Obispado en un comunicado. Además, debido a la crisis sanitaria, la fiesta de San Fulgencio se limitará tan solo a la celebración eucarística. La misa tendrá lugar mañana y será presidida por el obispo de Cartagena, José Manuel Lorca Planes.
Por otro lado, la tradicional bendición de animales que cada año se organiza por San Antón en la ermita del barrio murciano del mismo nombre ha quedado suspendida debido a la covid. «Que San Antón cuide y proteja a todos los animales de compañía, que mitigan muchas soledades, con su fiel compañía, siendo la alegría de muchos hogares», expresan desde el Consejo de Pastoral que organiza el acto.
