Cruz Roja Española en la Región de Murcia ha ayudado a un total de 130 familias en 2020 a afrontar su situación de pobreza energética con la rehabilitación de hogares, la renovación de electrodomésticos, el pago de suministros o el reparto de kits con materiales de aislamiento y eficiencia. «Estas semanas, muchas personas lo van a pasar mal porque no tienen, por ejemplo, agua caliente en su hogar y la tienen que calentar con ollas», según ha hecho saber a Europa Press la responsable del departamento de Medio Ambiente de Cruz Roja Española en la Región de Murcia, Tísca López Martínez.

«Y no son familias con un perfil concreto, sino que están en una situación que nosotros podemos considerar normalizada y que se ven en esas circunstancias en un momento dado», según López, quien advierte que «cualquiera de nosotros se puede ver en esa situación».

López ha recordado que esta intervención se enmarca en un proyecto a nivel estatal que arrancó hace varios años, cuando Cruz Roja hizo un estudio con el que detectó que muchas familias que estaban en situación de vulnerabilidad no podían mantener sus hogares en las condiciones de confort adecuadas.

«No solo se trata de la temperatura: hay familias que no tienen recursos económicos, y las que cuentan con pocos recursos los tienen que destinar a las cosas más básicas», afirma López.

«Hay muchas familias que viven en unas condiciones poco salubres», según esta responsable de Cruz Roja, quien explica que la mayoría son personas mayores o familias con niños pequeños, por lo que «se potencia muchísimo su situación de vulnerabilidad, pudiendo afectar al ámbito educativo y social de los menores e, incluso, a la salud».

En base a estos datos, Cruz Roja puso en marcha un proyecto para valorar las necesidades materiales de esas familias. «Por ejemplo, se trata de rehabilitar una vivienda, cubrir la adquisición de algún electrodoméstico roto o poderles hacer un acompañamiento a través de unos talleres de eficiencia energética», añade.

Y es que, «aunque es cierto que estas familias ahorran muchísimo porque les obliga su situación económica, siempre se pueden dar pautas de uso o hábitos que hagan ahorrar un poquito más», según esta responsable de Cruz Roja.

Sostiene que muchas de estas familias tienen «algún tipo de ayuda» en las facturas de la luz, porque no tienen recursos suficientes». Además, Cruz Roja deriva los casos detectados al departamento de intervención para ayudarles al pago de algún suministro.

Cruz Roja también reparte a estas familias un kit de eficiencia energética que contiene, sobre todo, bombillas y equipamiento para el aislamiento del hogar (burletes para aislar puertas y ventanas, aireadores para los grifos o bombillas led, que consumen menos y tienen menos potencia).

López manifiesta que las familias atendidas en 2020 han sido 130 y ha admitido que el objetivo era llegar a más a lo largo del año, pero la pandemia «ha afectado bastante» a este proyecto.

Y es que estas familias «tienen un aislamiento digital bastante grande», por lo que Cruz Roja no ha podido intervenir con ellas como ha hecho con otras familias, con las que ha podido contactar a través de Internet, realizando encuestas y talleres online. «Hasta que no hemos podido reunirnos de forma presencial con las familias, no hemos podido hacer apenas ninguna intervención más allá de llamadas telefónicas y consultas».

A las 130 familias beneficiarias se les ha hecho un análisis en sus casas, un taller y una entrega de kits. Además, cinco de esas familias se han beneficiado de una reforma y la adquisición de electrodomésticos.

López ha avanzado que se trata de un proyecto «de fondo» que continuará en 2021.