Las federaciones de asociaciones de padres de FAMPA Cartagena y Comarca, FAMPA del Guadalentín, CONFAPA piden al Gobierno regional dos semanas de clases online para los escolares de los 36 municipios confinados de la Región de Murcia como medida para proteger a los escolar frente al crecimiento de la tercera ola del coronavirus. Con esta medida, señalan, también se solucionaría las bajas temperaturas que se están registrando en las aulas de los centros educativos de la comunidad, "con las que se hace imposible estar en las clases para alumnos y profesores, si mantienen el nivel de ventilación necesario para cumplir las obligaciones sanitarias por covid-19".

Las AMPA señalan que tomar esta decisión no sería un problema para el sistema educativo murciano dado que los centros educativos "deberían estar ya equipados para tal eventualidad, tal como se viene pidiendo hace diez meses desde nuestras federaciones". Reclaman también que tras pasar estas dos semanas de clases telemáticas, y si la situación sanitaria lo permite, se vuelva al 100% de presencialidad en las aulas realizando un cribado masivo de test en profesorados y alumnos, así como personal no docente, en aulas donde se mantengan las distancias de seguridad, con el necesario aumento de plantilla docente para lograr la bajada de ratio del alumnado. Para los centros piden también que se instalen purificadores de aire con filtros HEPA y medidores de CO2, así como placas de policarbonato en las ventanas.

En caso de no ser tomadas medidas inmediatas por parte de la Consejería de Educación, las federaciones de AMPA amenazan con jornadas de protesta convocando a todas las asociaciones de padres de la Comunidad a la inasistencia los lunes en todos los centros educativos, "hasta que se nos escuche y se tomen las medidas necesarias, que a estas alturas del curso ya son de una urgencia imperiosa".

Las condiciones en las que se está desarrollando la actividad lectiva estos días preocupa a los padres, ya que señalan que se incumple la normativa estatal que establece que un lugar de trabajo debe tener una temperatura entre 17 y 27 grados. Debido a la ventilación obligatoria de las aulas "no se alcanza la temperatura mínima establecida". Por ello las federaciones señalan que denunciarán a la Consejería de Educación ante el Ministerio de Trabajo por estas condiciones y animan a las Asociaciones de Directores de Primaria y Secundaria de la Región a que lo hagan también.