El portavoz del PP en la Comisión de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana en el Senado, Francisco Bernabé, ha considerado que las declaraciones del Comisionado del Gobierno de España para el Corredor Mediterráneo en las que "abre las puertas" a una modificación del trazado europeo que dejaría de pasar por el Sureste peninsular para, en su lugar, conectar directamente Algeciras con La Mancha y de allí seguir ruta hasta Valencia, son claramente "un intento más de Pedro Sánchez de hacer daño a la Región de Murcia".

El senador 'popular' sostiene que esta iniciativa, en caso de llevarse a cabo, "perjudicaría principalmente a las provincias de Murcia, Alicante y Almería, dejando fuera del recorrido del Corredor Mediterráneo a los tres territorios que son vitales por su importante actividad económica productiva a nivel nacional, principalmente de la industria agroalimentaria y turística y con una gran concentración de población", según informaron fuentes del PP en un comunicado.

Para Bernabé, resulta curioso que este nuevo proyecto solo "afectaría a estas tres provincias, todas gobernadas por el PP, por lo que parece evidente que subyace un claro intento de castigo político dirigido contra las mismas".

En este sentido, ha remarcado que "hay que ser muy sectario para intentar desmontar a estas alturas el gran proyecto europeo del Corredor Mediterráneo solo por razones de índole ideológica, sin sopesar el alcance de los gravísimos perjuicios económicos directos y los enormes retrasos en la ejecución de la infraestructura que conllevaría dicha medida".

Desde el PPRM, tal y como ha subrayado el senador, "manifestamos nuestra más rotunda oposición a esta pretensión del Gobierno central y exigimos que se desmienta de manera oficial por parte del Ministerio de Transportes, ratificando la plena vigencia del proyecto del Corredor Mediterráneo".