Los empresarios murcianos tienen puestas todas sus esperanzas recuperación en las exportaciones. Las perspectivas del empresariado para 2021 son desfavorables de forma generalizada en todos los ámbitos de su actividad, con la única excepción de las ventas al exterior, según se desprende de la macroencuesta que anualmente realizan las Cámaras de Comercio europeas (Eurocámaras) entre unos 58.000 empresarios europeos, 219 de ellos de la Región.
La incertidumbre que afrontan todas las economías por los efectos de la pandemia de covid-19 y las medidas para contener los contagios ensombrecen las expectativas con las que los empresarios encaran el año 2021. Las previsiones de los encuestados murcianos son más pesimistas que la media española y europea en creación de empleo, inversiones y expectativas de ventas. Únicamente se muestran más optimistas ante las exportaciones, que el 28,1% de los encuestados espera mejorar este año. Esta previsión, que es la única positiva, se sitúa 4,7 puntos por encima de la media de España y 25,5 puntos por encima de la de Europa.
Las previsiones de caída del empleo muestran una menor disparidad, ya que el 9,1% de los empresarios de la Región espera reducir plantilla, mientras que en España este porcentaje baja al 4,7% y en Europa se reduce al 3,8%.
Por otra parte, el 22% neto de los encuestados murcianos prevé vender menos en el mercado nacional que en 2020, frente a la media del conjunto de las empresas españolas del 13% que espera reducir la facturación en el mercado doméstico y al 7,3% de las compañías europeas.
En todo caso, esta caída en las ventas sería menor a la declarada para el año finalizado, ya que el 57% neto de las empresas murcianas y el 51% de las españolas declara haber vendido menos.
Pero es la inversión, como una de las variables empresariales más necesitada de estabilidad y confianza empresarial, la que refleja un mayor pesimismo, con un 27% de las empresas murcianas que prevé reducirla. También en este caso las empresas de la Región son mucho más pesimistas, dado que en España prevé reducir la inversión el 13% de las encuestadas y en Europa, el 9%.
