El Sorteo Extraordinario del Niño, que pone fin a la Navidad, reparte hoy 700 millones de euros en premios, y solo el primero de ellos permitirá ganar dos millones de euros por serie, 200.000 euros al décimo. Y la Diosa Fortuna ha querido que sea el 19570, un número bastante repartido por el territorio nacional que ha rozado a la Región, concretamente a la pedanía murciana de Sangonera la Seca, a la administración situada en la Carretera de Lorca, en el número 36, que ha vendido un décimo de este número.

"Estaba viéndolo en mi casa, ha sido alucinante, me he puesto a chillar de la emoción", señala Candelaria Garnés, una de las trabajadoras del estanco con punto de venta frente a la Base Aérea de Alcantarilla, que ha vendido un décimo por máquina del primer premio de la Lotería del Niño. Este negocio familiar desde el año 2.000 es propiedad de Antonio Garnés, el hermano de Candelaria, desde que falleció el padre, Antonio Garnés. No es la primera vez que tienen la fortuna de repartir grandes premios, "el pasado mes de octubre dimos 123.000 euros en la Primitiva, en enero de 2020 dimos un primer premio de Lotería Nacional, y un quinto de la Lotería de Navidad, y un segundo premio del Niño en 2013, entre otros", informa Candelaria.

A todos sus afortunados poseedores, ¡enhorabuena! A quienes no, recordar que también hay veinte premios de 3.500 euros, y otros 1.400 premios de mil euros por serie, entre otros muchos.

Según los datos con los que contaba hasta el pasado 28 de diciembre Loterías y Apuestas del Estado, Castilla y León es la comunidad autónoma con un mayor gasto previsto por habitante (27,53 euros) en este Sorteo Extraordinario.

Para el Sorteo de este miércoles se estima un gasto medio de 17,57 euros por habitante, inferior al del pasado año cuando fue de 18,21 euros.

El número cero ha sido la terminación favorita del primer premio en la historia de este sorteo del Niño y ha salido en 21 ocasiones. Sin embargo, el número 3 solo ha sido agraciado 6 años.

Este Sorteo se conoce como el de 'El Niño' desde 1868, según referencias documentales de Loterías, que explica que la denominación se debe a la proximidad de la Epifanía del Señor o la Adoración al Niño por los Magos de Oriente.