Los menores tutelados por la Comunidad Autónoma han recibido este martes sus regalos de Navidad en los centros Santo Ángel de La Albatalía; Leyva en La Cueva-Monteagudo; y Cardenal Belluga en Murcia, en los que hay 17, 12 y 30 niños respectivamente, acogidos bajo medida protectora de guarda y tutela por la Administración y con edades comprendidas entre los 0 y 18 años.

La consejera de Mujer, Igualdad, LGTBI, Familias y Política Social, Isabel Franco, se ha desplazado este martes a estos tres centros para entregar regalos y juguetes a los menores, y compartir un día de fiesta con ellos. Ha destacado "la gran labor que desarrollan los profesionales de estos centros y la atención que reciben estos menores para que sientan, aún en estas circunstancias, el calor de la auténtica familia que forman".

La consejera ha insistido en que "los menores son uno de los colectivos más vulnerables de la sociedad. Su defensa y protección se ha convertido en un objetivo esencial de nuestras políticas para favorecer el desarrollo integral del niño y garantizar un nivel de vida adecuado a sus necesidades. Y con ese empeño trabajamos día a día", según informaron fuentes del Gobierno regional en un comunicado.

El centro de protección de menores Santo Ángel en la pedanía murciana de La Albatalía, de titularidad pública para la atención de menores con edades comprendidas entre los 6 y 18 años, se estructura técnica y organizativamente en tres módulos: de observación y acogida, residencial para adolescentes, y el que ha recibido este martes la visita, de media-larga estancia, con 17 plazas. Estos módulos dan respuesta de manera global y coordinada a las necesidades de protección de los menores que están en situación de desamparo cubriendo sus carencias y necesidades, además de realizar la intervención social, médica, psicológica y educativa necesaria.

La consejera, acompañada por el director general de Familias y Protección del Menor, visitó también el centro Leyva de la pedanía murciana de Monteagudo que actualmente cuenta con 12 internos, todos escolarizados, que están bajo medida protectora de guarda o tutela por haber sido retirados de sus familias debido a situaciones de desprotección, abandono, negligencia o cualquier otro tipo de maltrato infantil.

Todos los acogidos en el centro presentan algún tipo de discapacidad intelectual y/o física, en diferente grado, de leve a severo, y su edad está comprendida entre los seis y los diecisiete años. La gestión corre a cargo de la Asociación Leyva para el desarrollo de ocio y tiempo libre de personas con discapacidad intelectual en la Región de Murcia, en la que voluntarios participan en las actividades de ocio que realizan, y que pronto se espera puedan volver a la normalidad cuando la situación epidemiológica lo permita.

Los regalos de Navidad también han llegado en esta víspera de Reyes al centro de protección de menores Cardenal Belluga de Murcia, gestionado por las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl que atienden a 27 niños de hasta 6 años. La historia de este centro se remonta al año 1713, cuando el Rey Felipe V manifestó que era de su agrado fundar en la ciudad de Murcia una casa para la educación de niños y niñas huérfanos.