La consejería de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente, ha instalado plantas fotovoltaicas en once depuradoras de aguas residuales de la Región para impulsar el ahorro energético y reducir la huella de carbono, informaron fuentes de la comunidad.

Las obras, que se han llevado a cabo durante el segundo semestre de 2020 y que cuentan con una inversión de 2,5 millones cofinanciados con Fondos Feder, permiten dejar de emitir cerca de 1.000 toneladas de dióxido de carbono (CO2) al medio ambiente.

Las plantas fotovoltaicas producirán 1.800 megavatios para autoconsumo al año, el equivalente al gasto de electricidad anual de 520 hogares familiares. Además, supondrá un ahorro del 22 por ciento de la energía consumida de fuentes tradicionales y su sustitución por otras más respetuosas con el medio ambiente.

Estas actuaciones se han realizado dentro del programa de ayudas a proyectos singulares de entidades locales que favorezcan el paso a una economía baja en carbono en el marco del programa operativo Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) de crecimiento sostenible 2014-2020, cofinanciado por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE).

Las estaciones en las que se han instalado las plantas fotovoltaicas son Abanilla, Fortuna, Alguazas, Mula, Lorquí, Ceutí, Los Alcázares, Puerto Lumbreras, Calasparra y Bullas, además de La Unión, cuyos trabajos se espera que estén finalizados en las próximas semanas.

Las obras han consistido en la instalación de diversos campos solares de un total 10.000 metros cuadrados dentro de las instalaciones de las diversas depuradoras, compuestos por módulos fotovoltaicos soportados por una estructura de aluminio y conectados con un sistema de inversores para la conversión de energía eléctrica de continua a corriente alterna.