El hombre detenido en Nochebuena en la Región acusado de matar de un tiro en la cabeza a una vecina de Murcia en Torrevieja (Alicante) días antes habría admitido que apretó el gatillo, y se estaría investigando si lo hizo por encargo, dado que la víctima, presuntamente, estaría relacionada con el mundo de los 'vuelcos' de droga, indican fuentes cercanas al caso. El sospechoso, no obstante, cometió varias torpezas, consideran los expertos, como la de dejar un casquillo en la vivienda donde se cometió el crimen y arrojar la pistola a un contenedor muy cercano a la urbanización donde residía la joven, natural de un pueblo de Almería.

Los investigadores esperan que el individuo, en prisión provisional tras pasar a disposición judicial en el Juzgado de Guardia de Lorca el sábado, colabore con ellos con el fin de desentrañar el crimen, que se habría cometido en el marco de una red de tráfico de estupefacientes que salpicaría a la Región y a la vecina provincia.

La autoridad judicial determinó que sobre el caso pesase el secreto del sumario.

La Policía Judicial de la Guardia Civil capturó en la Ciudad del Sol a este sospechoso y a una mujer, que presuntamente encubría el asesinato de la joven de 26 años, cuyo cadáver fue hallado en un domicilio de la urbanización Los Leandros, en Torrevieja.

A las pocas horas de descubrirse a la chica ya fallecida, los investigadores del Instituto Armados recuperaron en un contenedor cercano al lugar del crimen un arma de fuego, cuyo posterior análisis confirmó que se trataba de la pistola que se había usado para disparar a la víctima.