El empleo precario ha sido la primera víctima de la pandemia para el secretario general de UGT en Murcia, Antonio Jiménez, que ayer ofreció su balance socioeconómico de la Región en el año 2020. Un dato que ejemplifica esta realidad lo encontramos «en los 18.900 puestos de trabajo temporal que se han perdido respecto al año anterior», lo que supone un 11 por ciento de retroceso en términos relativos, una cifra que supera incluso a la que tiene el empleo por cuenta propia, que cayó un 7 por ciento.

Para el secretario regional de UGT, la pandemia ha agudizado y empeorado todos los registros, «los salariales, el número de trabajadores no cubiertos por la negociación colectiva, el incremento del desempleo, el aumento del empleo vulnerable, y las brechas entre hombres y mujeres». En este contexto negativo, algo especialmente «sangrante» para Jiménez ha sido todo lo vinculado a la prevención de riesgos laborales, «es muy duro asumir que aún hoy no se hayan desarrollado instrumentos y estrategias para que los trabajadores puedan acometer su trabajo de forma adecuada en una situación de pandemia».

Para UGT, los ERTE han permitido salvaguardar el empleo indefinido y parte del empleo de duración determinada. «Demandamos en su día que estos empleos fueran también protegidos, y que se prohibiese despedir, o que se interrumpiese el cómputo del plazo de los empleos temporales, y eso ha permitido el apuntalamiento del empleo». Según Jiménez, si no se hubiesen regulado los ERTE, «esta crisis hubiese sido devastadora». Pese a todo, recordó que «la gestión ineficiente de los ERTE», por la falta de recursos, retrasó de manera inaceptable el cobro de las prestaciones de desempleo a muchas familias; por eso, señala Antonio Jiménez, en el pacto regional suscrito el pasado mes de mayo, «conseguimos introducir unos complementos a estas prestaciones para aquellos que estando en el ERTE, tuvieran los salarios más bajos».

El desempleo sufrió una fuerte escalada este año, informó el sindicato, y hasta el tercer trimestre de 2020 una media de 17.200 personas se sumaron al paro, casi un 17 por ciento más que con respecto al año anterior. Sobre el empleo juvenil, indicó que el 76,2 por ciento de los murcianos menores de 30 años tienen empleos vulnerables, «una cifra desproporcionada, que nos coloca como la cuarta comunidad con mayor vulnerabilidad».

En este momento hay 37 convenios de sector que afectan a 200.000 trabajadores pendientes de las actualización de sus condiciones de trabajo y salariales, «estamos en una situación de bloqueo provocado por las organizaciones empresariales que está provocando una parálisis en la concertación que en algunas casos se extiende diez años, como es el caso del sector de la hostelería». Según el secretario de UGT, «muchos de estos convenios no recogen ni siquiera la tabla salarial del SMI (Salario Mínimo Interprofesional) del año 2020», y hay tareas pendientes, como la regulación del teletrabajo, o las obligaciones en materia de igualdad.

Sobre las nuevas realidades laborales y económicas provocadas por la covid, como las contrataciones a través de las ETT, el teletrabajo o las plataformas digitales, Jiménez afirmóque se «han introducido nuevos nichos de precariedad laboral en la Región», y recordó que Murcia sigue siendo la segunda comunidad que más contratos a través de ETT aporta al conjunto del país.