El PSRM-PSOE se ha mostrado a favor de la subida del Salario Mínimo Interprofesional que propone el Ministerio de Trabajo para «sacar de esa brecha de exclusión en la que se encuentra casi un tercio de los murcianos».

La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha puesto sobre la mesa en las últimas jornadas la propuesta de subir el SMI, una medida que ha generado debate entre el sector morado y el sector socialista del Ejecutivo de coalición con la ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, al frente, que se ha mostrado reacia.

Desde el PSRM-PSOE, Abenza ha afirmado, a preguntas de la Agencia Efe, que «todo lo que repercuta en bien para la ciudadanía de la Región de Murcia siempre va a ser bienvenido» y ha puesto el foco en que «España siempre está por debajo del nivel de Europa» en esta materia.

«No debemos olvidar que un tercio de la ciudadanía, 473.000 murcianos, sufre exclusión social y pobreza», ha señalado Abenza, para añadir que todo lo que se acerque a cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible «y, sobre todo, a sacar de esa brecha de exclusión en la que se encuentran a casi un tercio de los murcianos es bienvenido».

En la misma línea se ha mostrado el diputado de Podemos Rafael Esteban, quien ha apuntado que «no se puede dejar a nadie atrás» para salir de esta crisis, ahondando en que no se puede plantear que puedan salir las empresas y no las personas de esta situación.

Mientras, la parlamentaria del PP María del Carmen Pelegrín ha pedido ayudar, sobre todo, a las personas «más vulnerables», trabajar para superar la crisis que ha afectado más a España por, en algunos casos, una «mala gestión y previsión», así como pedir mesas de diálogo con los agentes sociales.

«No es el momento de hablar de una subida del SMI», ha sentenciado el diputado de Ciudadanos Francisco Álvarez, quien ha abogado por buscar soluciones similares a las adoptadas por otros países, como dar ayudas «de todo tipo» a las personas más perjudicadas por la pandemia.

Finalmente, el diputado de Vox Francisco Carrera ha acusado al Ejecutivo central de ser «muy imprudente» porque «hay una gravísima crisis económica que parece que no existe para el Gobierno». «Cuando ellos usan la palabra mínimo se convierte en el máximo del sector, porque como es tan alto, ya no hay negociación entre empleador y empleado», ha argumentado.