Trescientos sanitarios, investigadores y académicos, algunos de ellos desde la comunidad murciana, han firmado un manifiesto en el que piden la creación de un órgano independiente que evalúe las prácticas y políticas sanitarias tras constatar la «debilidad» del Sistema Nacional de Salud y la «arbitrariedad» de las decisiones adoptadas en la pandemia. Entre los firmantes, pertenecientes a hospitales, universidades e instituciones de todo el país, figuran el Colegio de Economistas, la exconsejera de Sanidad Encarna Guillén, del Instituto Murciano de Investigación Biosanitaria; Asensio López Santiago, gerente del Servicio Murciano de Salud.

También José María Abellán Perpiñán y Fernando Ignacio Sánchez Martínez, profesores de economía aplicada en el Instituto Universitario de Investigación en Envejecimiento, de la Universidad de Murcia, y su colega de la Politécnica de Cartagena, el catedrático Ángel López Nicolás, y José Luis Aguayo Albasini, del servicio de cirugía general del hospital Morales Meseguer, así como Alberto Torres Cantero, del servicio de medicina preventiva del Virgen de la Arrixaca. También se muestran convencidos de que España necesita «imperiosamente» una agencia o institución, al estilo de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), que se ocupe de analizar las prestaciones sanitarias, sus tecnologías, medicamentos e indicaciones terapéuticas, compaginando resultados con costes.

Este órgano, explican, carecería de capacidades ejecutivas, daría forma a la decisión política pero en ningún caso la sustituiría, y su funcionamiento debería regirse por los principios de «independencia, rigor técnico y buen gobierno, favoreciendo la transparencia y contribuyendo a la rendición de cuentas».