La financiación propia de las entidades de la discapacidad se ha doblado en diez años, pasando del 14 al 32 % de sus ingresos, según ha cifrado el presidente de la Asociación de Ayuda a personas afectadas por Déficit de Atención e Hiperactividad de Molina de Segura (ADAHI), José Manuel Santos, en la Comisión de Sanidad y Política Social de la Asamblea Regional. La Cámara está realizando una serie de audiencias legislativas con profesionales del sector de cara a la mejora de la ley de Servicios Sociales que se está tramitando en el Parlamento regional.

Santos ha puesto el foco en la financiación de las organizaciones encargadas de tratar con personas con discapacidad y ha señalado que se debe «llegar a contratar aquellos servicios de largo recorrido» porque «las subvenciones se tienen que quedar para actuaciones o inversiones, que por desgracia llevamos muchos años sin subvenciones para grandes inversiones».

Ha calificado las subvenciones de «peligrosas» porque «condicionan el proyecto, están sujetas a cambios políticos y no generan estabilidad» en la atención a las necesidades de los usuarios. En este sentido, ha relatado que «cada vez las entidades han ido aumentando la financiación privada con los años» y que «la financiación propia se ha doblado en solo diez años». «Las entidades han entendido que no pueden depender del sector público, que la calidad de vida de sus familiares tiene que tener cierta estabilidad y por eso se ve que hemos pasado de un 14 a un 32 %» en cuanto a financiación propia, ha detallado. Santos ha señalado que «entre todas las cifras de financiación pública han crecido las subvenciones, que han pasado de un 40 a un 63% en tan solo 10 años».