Llego al número diez de la calle Francisco Paredes, en la pedanía de Puente Tocinos. Me reciben con una cálida bienvenida, solo al alcance de las buenas personas, Encarna Ruiz, artesana belenista y Manuel Griñán, su esposo, también vinculado a este noble y vocacional oficio. Sus miradas, tras la mascarilla, te hacen sentir como en casa; son miradas sinceras, de amistad, generosas y cercanas. Me invitan a pasar al taller, donde se ve y se huele el tradicional barro con el que elaboran desde hace más de cuarenta años sus famosos nacimientos y belenes.

¿Cómo se presenta esta Navidad, marcada por la covid?

E: Está afectando, porque los clientes, con el miedo que hay, no hacen pedidos; incluso han suspendido los ya realizados y estas circunstancias han hecho que casi no tengamos ventas este año.

M: Y se suma la suspensión de muchas ferias, como la de Córdoba y Sevilla, donde se vende bastante, o casi suspendidas, como Madrid y Barcelona. Para nosotros supone la ruina, ya que con toda seguridad tampoco se celebre este año la tradicional feria de Navidad en Alfonso X. Una pena, porque al cliente le gusta tocar la figura antes de comprar y comprobar que es de barro, que es artesanal y no de plástico o resina.

¿Qué plan B tenemos para llegar a vosotros?

E: Nuestro taller está abierto a todo aquel que quiera comprar figuras para su belén o incluso un nacimiento completo. Solo tiene que venir a Puente Tocinos, si las restricciones de movilidad lo permiten y podrá comprobar de primera mano la calidad y calidez de nuestra artesanía belenística.

¿Cuántos años lleváis en esta profesión tan vocacional?

M: Voy a cumplir sesenta años, y desde que tenía doce ya estaba trabajando con mi padre, porque no me gustaba estudiar y cuando salía de la escuela me iba a su taller.

E: Llevo al lado de Manolo desde que lo conocí con dieciséis años. Me propuso venir aquí, a trabajar a su empresa y, hasta hoy: cuarenta años a su lado.

Encarna, ¿cómo llegaste a enamorarte de esta profesión?

E: Me gustaban los belenes. Me metí mucho en la pintura, sobre todo. Me fascina este trabajo y no me importan las horas que haya que dedicarle. Me gustaría que esto se pudiera mantener, pero no tenemos quien quiera continuar este oficio.

¿Se vende igual que antaño?

M: Hace más de diez años que la competencia de otros países nos quita mucho trabajo, sobre todo en las ferias grandes porque competimos también con figuras realizadas con otros materiales. Lo que hacemos aquí en Puente Tocinos es artesanal y de barro.

¿Por qué pagar más por un trabajo artesanal?

M: La artesanía lleva su trabajo. Hay clientes que me han comprado en Murcia y cuando han venido al taller y ven el proceso se dan cuenta del precio que deben tener. Además, en el taller hacemos descuento por el esfuerzo que hacen al venir.

Encarna, el artesano belenista ¿nace o se hace?

E: Para mí tiene doble sentido, porque yo no nací con eso. Yo empecé con ellos a trabajar y me vino la vocación en ese instante, en el momento en que empecé a trabajar el barro, a tocarlo.

¿Se interesan las nuevas generaciones por este oficio?

M: A las criaturas de hoy en día no les gusta esto. Hace años metimos a gente joven a trabajar y se han 'hartao', porque es un trabajo muy laborioso. Antes trabajábamos mucho pero se ganaba al menos para vivir y tener un desahogo. Hoy en día, no. Tengo familiares y amigos que se dedican a esto y la mayoría de sus hijos no van a continuar con el oficio.

¿Tiempo de elaboración y precio de un nacimiento?

M: Si hablamos de un nacimiento para una casa, no se puede hacer en un día. Según el tamaño, elaboramos seis o siete piezas y el proceso suele llevar unos dos o tres días. El nacimiento estándar es de 21 cm, y el precio en taller es de unos 130 euros. En la tienda suele costar un poco más. Muchos vienen para hacer regalos en bodas, aniversarios, jubilaciones€ o lo hacían antes de la covid.

¿Habéis pensado en dar el salto fuera de España?

M: La feria más importante del juguete y el belén está en Nuremberg. Lo hacemos a través de un cliente, pero nunca se sabe con esto de Internet si podremos vender directamente algún día. En ello estamos.

¿Qué les diríais a los lectores de este artículo?

E: Les invitamos a venir a Puente Tocinos y visitarnos. Les recibiremos en nuestro taller con los brazos abiertos y mascarilla en boca, (sonríe).

M: Y si nos comentan que vienen por haber leído esta entrevista, tendremos un detalle con los lectores.