Los trabajadores de Latbus decidirán mañana si mantienen la huelga o ponen fin a la protesta que iniciaron el pasado 15 de octubre, aunque desde hace varias semanas el paro se reducía a la jornada de los jueves. La decisión se produce después de que la compañía anunciara que consideraba «abusiva» la huelga y amenazara con reclamar daños y perjuicios por las pérdidas que le está ocasionando.

El comité de empresa de la concesionaria de las líneas que conectan las pedanías y el área metropolitana de Murcia ha anunciado que someterá a votación la desconvocatoria de la huelga este miércoles entre las 6.00 y las 8.15.00 horas y entre las 12.00 y las 15.00 horas.

Los representantes de la plantilla de Latbus consideran que «el único movimiento que se ha conseguido es una negociación exprés con la empresa, quien nos ha planeado una propuesta que resulta más perjudicial que beneficiosa».

Añaden también la Consejería de Fomento y el Ayuntamiento de Murcia «nos dan la espalda», por lo que las únicas salidas quedan reducidas a la negociación entre la concesionaria y los trabajadores.

El paro fue convocado para reclamar la recuperación del cien por cien de los servicios que Latbus prestaba antes de la pandemia y el rescate de los trabajadores que permanecen incluidos en un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE).

Lejos de aceptar sus propuestas, Latbus ha amenazado con llevar la protesta a los tribunales, porque considera que la convocatoria no ha seguido el procedimiento legal y que la empresa está sufriendo un perjuicio desproporcionado.

La compañía había solicitado la mediación previa de la Oficina de Resolución Extrajudicial como paso previo para presentar un conflicto colectivo, al entender que «la huelga es abusiva» y «está penalizando a la empresa», según adelantó el director general de Latbus, Andrés Brugarolas, que se mostró dispuesto a «exigir daños y perjuicios».