La actividad presencial en los centros de día para personas con discapacidad y Servicios de Promoción de la Autonomía Personal se prestará para grupos más amplios que los establecidos hasta ahora, por lo que pasará a un máximo de seis a ocho personas. Esta medida estaba antes limitada a dos o tres personas máximo.

Seguirán teniendo prioridad aquellos usuarios que por su deterioro físico o cognitivo, o por su situación socioeconómica personal o familiar, requieran una atención preferente. Cuando no sea posible una atención presencial, el servicio se prestará de forma telemática, promoviendo la continuidad del mismo en domicilio o en el entorno, con realización de actividades programadas telemáticamente.