La Consejería de Empleo, a través de la Inspección de Trabajo, pondrá en marcha nuevas campañas de prevención de la covid-19 entre los trabajadores y controlará las posibles situaciones de fraude derivadas de la tramitación de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE). Así lo anunció ayer el consejero, Miguel Motas, en la Comisión Operativa Autonómica de Inspección de Trabajo, que coordina a la Comunidad y a la Administración central y que ha planificado la actuación inspectora en 2021. El próximo año se iniciarán tres nuevas campañas, con 220 actuaciones, para el control de los ERTE de fuerza mayor y por causas económicas y de control de los derechos laborales de los trabajadores ante la pandemia.

También se llevará a cabo la campaña para detectar connivencias en el desempleo motivado por la pandemia, con 336 actuaciones programadas, destinada a la comprobación de las posibles situaciones de fraude derivadas de la tramitación y gestión de los ERTE.

En la reunión se avanzaron los resultados del informe final del Plan Director, que señalan que el pasado año, 18.308 contratos temporales fueron transformados en indefinidos. Además, se recaudaron 62 millones de euros en sanciones por incumplir la normativa laboral y se recuperaron 253.000 euros de salarios impagados. Motas destacó que «la reunión ha sido enriquecedora y se ha puesto de manifiesto que la colaboración estrecha entre administraciones ha solventado situaciones que se han presentado con motivo de la covid-19». En 2021 se pondrán en marcha dos nuevas campañas para la prevención, una de ellas con actuaciones relacionadas con los riesgos biológicos derivados del coronavirus en establecimientos sanitarios, sociosanitarios y laboratorios.