«Ha habido incidencias, pero el comportamiento general de los visitantes ha sido ejemplar y todo ha transcurrido con normalidad», aseguró ayer Manuel Rubio, el responsable de seguridad de la empresa Viriato, la encargada de establecer el dispositivo de seguridad desplegado en el cementerio de Nuestro Padre Jesús, el camposanto de titularidad municipal más importante de Murcia. La empresa de seguridad agradeció la ayuda de los efectivos de Policía Local que se han desplazado hasta el lugar, «sin ellos no hubiera sido posible garantizar la seguridad en un día como hoy, sobre todo en exteriores y organizando el tráfico».

Además, Rubio explicó que han implantado, unas normas «muy sencillas» y generaron un flujo ordenado de personas con una salida y una entrada para evitar posibles aglomeraciones. El recorrido propuesto sólo se saltó cuando se trataba de personas muy mayores o con movilidad reducida.

Ese flujo fue constante, y a pesar de que el dispositivo estaba preparado para un límite de 10.000 personas, en ningún momento se ha superado el 10 por ciento del aforo del recinto funerario, algo que Manuel Rubio achaca sin duda al estado de alarma y al escalonamiento recomendado que incluirá el día de hoy, también festivo.

Ventas en la UCI

El agradecimiento por la actitud cívica de los vecinos chocó directamente con los intereses comerciales de la zona. José Martínez es el encargado de Juan Simón Floristas, uno de los puestos con más solera ubicados en la puerta principal del cementerio de Nuestro Padre Jesús, y afirmó que «esta semana la llegada de visitantes ha sido fluida, pero sólo venían a ver sus tumbas y a limpiar; nadie pone flores cuatro o cinco días antes del día de Todos los Santos, por lo que venta ha sido poquísima o menos, y entre ayer y hoy, como puedes ver, la afluencia es cero, aquí está el producto y nosotros de brazos cruzados, la gente que hay en la puerta son empleados nuestros, del bar, policías o periodistas; otra fecha perdida en el calendario».

Martínez se atreve a poner una cifra a sus pérdidas, «te diría que es un 95 por ciento menos que otros años, no estoy exagerando, y para nosotros esto era el impulso para aguantar lo que queda de año, hemos perdido el año, ni eventos, ni Semana Santa… El sector de la floristería está en la UCI y nos queda un paso para entrar al cementerio».

Ciudad portuaria

El coronavirus marca la festividad de Los Santos en Cartagena. Los mensajes de concienciación y prudencia para evitar aglomeraciones en los cementerios del municipio que durante las últimas semanas de octubre han lanzado desde la Concejalía de Sanidad, han hecho mella en los ciudadanos de la ciudad portuaria.

Sin apenas visitantes, así se encontraban durante la jornada de ayer los dos camposantos cartageneros más relevantes del municipio. En el cementerio de San Antón, dos guardias de seguridad controlaban la entrada y salida de visitantes y vigilaban que todo aquel que pusiera un pie en el recinto se higienizara las manos previamente. Además, una patrulla de la Policía Local custodiaba la explanada central para evitar aglomeraciones. Sin embargo, no fue necesario, ni si quiera en las horas puntas se llegó a «completar el aforo», comentaban los trabajadores del cementerio. Una estampa que dista mucho de la de otros años. «No hay nadie», comentaba Manuela Martínez, «el año pasado a estas horas esto estaba a reventar», añade la vecina.

En el cementerio de Nuestra Señora de Los Remedios la situación era similar, muy pocos usuarios y muy espaciados, esperaban a que los guardias de seguridad les tomaran la temperatura para poder acceder al camposanto y depositar los ramos de flores en las tumbas de sus seres queridos. «Hay menos de la mitad de gente que cualquier año», comentaba Francisco Rojo con su esposa.

Tanto los trabajadores de ambos cementerios, como los propietarios de los puestos de flores cercanos aseguraban que «los días fuertes fueron tanto el jueves como el viernes», pero que el sábado tampoco se acercó «demasiada gente», aunque sí «mas de la que ha venido hoy». Sin embargo, en las tumbas y panteones cartageneros no faltaban las flores .