El perfil mayoritario del adicto en la Región de Murcia es un hombre de 30 a 39 años de edad, con empleo a tiempo completo y consumidor de cocaína o alcohol, según el informe extraordinario del Observatorio 2013-2019 publicado este jueves por la asociación Proyecto Hombre.

Por sexos, en la Región de Murcia hay un 86,1% de hombres y un 13,9% de mujeres, mientras que por franjas de edad predominan las de mediana edad, con un 44,1% en la treintena, un 24,9% entre los 40 y los 49 años, un 18,7% en la veintena y un 10,3% entre los 50 y los 59 años.

En cuanto al patrón de empleo usual, el 76,2% de los adictos está a tiempo completo, el 11% a tiempo parcial con un horario regular, el 5,8% está parado o es ama de casa, el 3,4% con un horario irregular y temporal, el 2% está retirado o tiene una invalidez, el 1,2% es estudiante y el 0,5% está en un ambiente protegido.

Las principales sustancias que consumen los adictos en la Región de Murcia son cocaína (37%), alcohol y otras drogas (26,8%), alcohol en grandes cantidades (12,4%), cannabis (6,7%), cualquier dosis de alcohol (5,7%), heroína (4,2%), más de una sustancia (3,8%), otros (2,6%), anfetaminas (0,3%) y otros opiáceos o analgésicos (0,2%).

En España, el porcentaje de personas en tratamiento por consumo de cocaína ha tenido un incremento relevante en los últimos siete años, pasando del 27,2 % en 2013 al 35,3 % en 2019, mientras han disminuido las que tienen problemas con la heroína, bajando del 5 % al 2,8 %.

El resto de sustancias presentan pocas variaciones, con una ligera tendencia a la baja en alcohol y un pequeño incremento de las anfetaminas.

El informe subraya que solo un 15,4 % de los que acceden a tratamiento son mujeres, al tener más cargas familiares y sufrir mayor estigma social.

El estudio abarca a 18.683 personas usuarias de 27 centros, ha especificado el presidente de Proyecto Hombre, Alfonso Arana, que ha resaltado "el valor humano" detrás de cada una y el trabajo para ofrecerles "espacios de esperanza" en una asociación que ha cumplido 30 años.

El 93,1 % del colectivo tratado son personas nacidas en España. La mayor parte por problemas con la cocaína, más en hombres (33,5 %) que en mujeres (24,1 %)

En segundo lugar aparece el alcohol, con mayor proporción entre mujeres (36,2 %) que hombres (21,7 %).

La edad media de inicio en la cocaína es 20 años, de alcohol ya problemático a los 21,7 años, de alcohol diario a los 16 años y de cannabis a los 16,7 años.

Arana ha asegurado, por otra parte, que en la mayor parte de los centros los contagios por coronavirus están a "cero" y que han adaptado los tratamientos y actividades a las medidas preventivas.

PERFIL: HOMBRE SOLTERO DE 38 AÑOS

En estos siete años, el perfil de las personas atendidas es hombre (84,6 %), 38 años, soltero, trabajador a tiempo completo, bajo nivel formativo y sin grandes cargas familiares.

La principal sustancia de consumo en el grupo masculino es la cocaína, aumentando casi un 9 % desde 2013 (28,3 %) al 2019 (37 %).

Entre las mujeres, la principal sustancia es el alcohol y la edad media de inicio de tratamiento es 39,9 años, dos años y medio después que los hombres.

En ambos grupos es ascendente la evolución de la edad máxima, que pasa de los 72 a los 78 años.

Se percibe una elevada presencia de la soltería (59,1 %), pero tan solo el 13,7 % viven solos.

Alrededor de un cuarto de las personas tratadas en Proyecto Hombre convive con personas que, a su vez, tienen problemas con el alcohol u otras drogas, lo que agrava su rehabilitación.

En el ámbito de la salud mental, se aprecian trastornos de ansiedad severa (65,3 %), problemas emocionales/psicológicos (51,9 %) y depresión severa (51,8 %).

Un 40,8 % de las personas atendidas ha tenido ideas suicidas a lo largo de la vida y un 23,2 % lo ha intentado.

MUJERES, MAYOR VULNERABILIDAD

En general, ellas presentan menor apoyo socio familiar y más vulnerabilidad: un 11 % viven solas con sus hijos, mientras que entre los hombres sólo llega al 1 %, ha recalcado Elena Presencio, directora de la asociación, que ha señalado que se las tacha de "malas madres", "malas esposas" y "malas hijas".

Tienen un nivel formativo similar al de los varones e incluso más elevado pero acceden a menos empleo, más trabajo doméstico y jornadas laborales más reducidas.

Ellas también padecen más problemas de salud crónicos.

Desde 2013, la evolución de las mujeres atendidas ha tenido un leve incremento: del 14,8 % de 2013 al 16,1 % en 2019.

Respecto a la conflictividad a lo largo de la vida en los usuarios de Proyecto Hombre se ha dado principalmente con la pareja, seguida de la madre o el padre y los hermanos.

En el caso de las mujeres predominan los problemas serios con los hijos, la pareja, la madre y los hermanos.

EMPLEOS NO CUALIFICADOS

El 64,5 % de las personas tratadas ocupa o ha ocupado un empleo no cualificado.

En el periodo anterior a acudir a la asociación se observa una pérdida de empleo. Así, el 73,8 % las personas estaba empleada en los tres años anteriores al ingreso pero el porcentaje baja al 38,1 % al acceder al tratamiento.

En el ámbito educativo los bajos niveles formativos son una constante: más de la mitad de las personas continúan sin estudios o de Primaria, ha dicho Jesús Mullor, presidente de la Comisión de Evaluación de Proyecto Hombre.

Por lo que se ven predecibles mayores obstáculos para la reinserción laboral en las personas que finalizan el proceso de tratamiento a causa de la crisis económica y sanitaria.

"V" DE VALIENTES

Para poner en valor a todas las personas que forman Proyecto Hombre, se ha presentado la campaña de sensibilización "V de Valientes", con el apoyo del Plan Nacional sobre Drogas y la Fundación "La Caixa".

Es la "otra cara" de las personas con problemas de adicción en tratamiento, familiares, terapeutas y voluntarios, todos ellos "motivados y con valentía para afrontar cualquier problemática".