Pedro S.G., apodado El Karateca y que estaba en prisión a la espera de juicio por delitos de narcotráfico, ha salido libre tras pagar la fianza de 250.000 euros, impuesta el pasado agosto, mediante 15 ingresos en la cuenta del tribunal. Así lo confirmó a esta Redacción su abogado, el letrado José María Caballero Salinas.

El auto dispone que sea puesto en libertad "si no estuviera privado de ella por otra causa legal", y le obliga a fijar un domicilio en España "que no podrá variar sin comunicarlo al Tribunal", y, además, impone la retirada del pasaporte, la prohibición de salida de España y la obligación de presentarse ante el juzgado tres días a la semana.

Por último, el acusado tiene prohibido comunicarse por cualquier medio con los testigos protegidos y aproximarse a menos de 1.000 metros de su domicilio o del lugar en que se hallen. En la resolución, los magistrados advierten que el incumplimiento de cualquiera de estas obligaciones dará lugar a la revocación de la libertad acordada con perdida de la fianza y a su reingreso en prisión.

Mientras, el juicio, aún pendiente, corre el peligro de tener que ser aplazado de nuevo si se aceptan las peticiones hechas por varios de los letrados defensores. La vista oral ya fue aplazada el pasado 7 de octubre al estar contagiados de la covid-19 dos acusados que se considera tenían un papel destacado en la supuesta organización ilegal, acordándose entonces como fecha de reanudación de la misma la del 3 de noviembre.

Ahora, uno de los letrados ha pedido el aplazamiento al coincidir la vista con otra que tiene señalada en la Audiencia Nacional, mientras que otros dos han insistido en el riesgo de contagio del coronavirus.

Durante el planteamiento de las cuestiones previas llevado a cabo el 7 de octubre, la Sala señaló que, según la valoración del riesgo hecha por la misma, el salón de actos de la Ciudad de la Justicia de Murcia, donde se desarrollaría el juicio no era motivo de suspensión, pero sí lo era la ausencia de aquellos dos acusados contagiados de la covid-19.

Para el tribunal, continuar con la vista sin la presencia de ambos, Cayetano C.C. y Francisco Javier P.M., podría dar lugar a indefensión, ya que sus declaraciones pueden repercutir en los demás por el papel protagonista que, presuntamente, tenían en el grupo.

Ese primer aplazamiento obligó a la Audiencia a establecer un nuevo calendario de sesiones, con la esperanza de que los contagiados del coronavirus pudieran recuperar recuperar su salud antes del tres de noviembre y que el juicio se pudiera reanudar en esa fecha, con la vista puesta en que acabara en los primeros días de febrero próximo.

La Fiscalía tiene solicitadas para el principal acusado, Pedro S.G., penas que suman 17 años y diez meses de prisión y multas que superan los 2,5 millones de euros por los delitos de tráfico de drogas, defraudación de fluido eléctrico y depósito de armas.

Señala también el ministerio público que solo en uno de los pisos directamente controlados por el mismo, ubicado en una pedanía murciana, la Policía Nacional se incautó de 233 kilos de marihuana, valorados inicialmente en 274.000 euros, así como seis escopetas, tres rifles, dos fusiles de asalto, una pistola, un millar de cartuchos y más de 300.000 euros que se considera procedían del tráfico ilícito de drogas.