Los camposantos de la Región se preparan para recibir durante los próximos días a cientos de personas que aprovechan la festividad de Todos Los Santos para llevar flores a sus difuntos y poner a punto panteones y tumbas. Sin embargo, debido a la crisis sanitaria provocada por la covid-19, en esta ocasión las visitas serán muy diferentes a las de años anteriores. Los ayuntamientos de los diferentes municipios han elaborado planes de contingencia que contemplan varias entradas y salidas para evitar aglomeraciones, así como más vigilancia policial para asegurarse de que se cumplen los protocolos establecidos.

En Murcia, las fuentes estarán cerradas para evitar contagios, por lo que la tarea de limpiar los sepulcros se complica para los visitantes del cementerio Nuestro Padre Jesús. El Ayuntamiento, además, ha contratado una empresa de seguridad para controlar los aforos y el cumplimiento de la normativa. Así, se establecerá un circuito de entrada y salida, se señalizará el interior de la instalación indicando a los ciudadanos las distancias y movimientos permitidos de una sola dirección.

Por primera vez en la historia los jumillanos no podrán acudir al cementerio en la noche de difuntos, una arraigada tradición entre los vecinos del municipio. El camposanto de Jumilla permanecerá clausurado desde las diez de la noche del día 1, aunque se mantendrá la iluminación, indican desde el Consistorio.

En Cartagena, los cementerios permanecerán abiertos, aunque como también se ha realizado en otros municipios, las autoridades locales han pedido a los vecinos espaciar al máximo sus visitas para evitar aglomeraciones, una recomendación que los cartageneros se han tomado «a rajatabla». Según explica Beatriz Delgado, propietaria de la floristería La Campana, frente al camposanto de San Antón, «las visitas se han adelantado este año», la empresaria asegura que «estábamos asustados por si los cementerios no se abrían finalmente, incluso nuestros clientes nos llamaban para preguntar». Finalmente, los vecinos están acudiendo de forma ordenada , aunque las medidas de seguridad que han restringido el acceso al parking de San Antón han provocado que los usuarios estacionen sus vehículos en la calzada. «Nos hemos pensado si venir porque tenía un poco de miedo por el virus», explica Juani Cazorla, «finalmente hemos decidido realizar la visita entre semana porque el sábado y el domingo seguro que habrá mucha más gente».