Las visitas en centros residenciales de mayores y de discapacidad, además de en viviendas tuteladas, han sido limitadas en la Región de Murcia. Así lo ha anunciado en un comunicado la Consejería de Mujer, Igualdad, LGTBI, Familias y Política Social a través del Instituto Murciano de Acción Social (IMAS).

Dichas visitas sólo podrán realizarse bajo supervisión de un profesional, en exteriores y zonas ajardinadas o en zonas interiores habilitadas, cumpliendo siempre con todos los protocolos de seguridad e higiene establecidos por la autoridades sanitarias, según informaron fuentes de la Consejería.

Los residentes podrán realizar salidas terapéuticas y visitas médicas, siempre acompañados de un profesional, e incluso se les facilitará la opción de trasladar su residencia fuera del centro si así lo estiman oportuno sin perder su derecho a plaza. Los ingresos, reingresos y traslados quedan suspendidos salvo casos de emergencia social o por otras causas debidamente justificadas.

En los centros de día de personas con discapacidad y Servicios de Promoción de la Autonomía Personal la actividad presencial se limitará a grupos muy reducidos (2-3 personas), preferentemente para aquellos usuarios que, por su situación sociofamiliar, necesiten ser atendidos. El resto de usuarios recibirán atención de manera telemática.

Por otro lado, los centros de desarrollo infantil y atención temprana mantendrán su actividad presencial, a excepción de aquellos centros en los que se declare algún positivo en COVID en trabajadores o personas usuarias; en ese caso, los servicios sanitarios deberán estudiar la situación. El IMAS también ha procedido al cierre de los centros sociales así como de los centros de día de personas mayores, cuyos usuarios recibirán el servicio mediante atención telefónica, telemática y/o la atención presencial en el domicilio o entorno.

Todas estas medidas entraron en vigor este domingo 25 de octubre y se prolongarán según la evolución de la COVID.