La consejera de Educación de Murcia, Esperanza Moreno, recalcó ayer que el primer mes de clases en la Región deja un «balance positivo», tiempo en el que no se ha llegado a cerrar ningún centro educativo por la incidencia del virus en las aulas. Defendió también Moreno que las medidas de prevención y protocolos sanitarios establecidos por Educación y la Consejería de Salud funcionan en los colegios e institutos, un «protocolo muy exigente» que garantiza la distancia de metro y medio entre alumnos y el uso obligatorio de la mascarilla desde los seis años. Los contagios, señaló, se producen fuera de las aulas y no dentro, y se aísla correctamente a los contactos estrechos.

Esta valoración choca con la opinión que expresa la plataforma Docentes Unidos, que adelanta que la Consejería de Educación, con este balance positivo, está preparando un escenario de vuelta a la modalidad presencial en los centros con «los mismos recursos y las mismas ratios por aula». Los profesores no pueden estar del lado de la Consejera, señalan desde la plataforma, porque estos corroboran «día a día que es imposible mantener una distancia de seguridad entre los alumnos ni una correcta ventilación de las aulas, entre otras medidas que están fallando».