Los profesionales sanitarios y los no sanitarios que trabajan en centros de salud de la Región de Murcia han estado en primera línea para combatir la pandemia del coronavirus desde el pasado mes de marzo mientras que muchos trabajadores de otros sectores tuvieron que volver a sus casas para cumplir con el estado de alarma, que llevó a muchas empresas a cerrar o a reducir su actividad al mínimo.

Esta mayor exposición de los trabajadores del Servicio Murciano de Salud (SMS) ha llevado a que las bajas se hayan disparado en estos últimos meses en comparación con el mismo periodo del año anterior.

Precisamente, desde el 15 de marzo, cuando se inició el estado de alarma por la pandemia de la covid en España, y hasta el pasado 15 de septiembre, el SMS ha tramitado un total de 10.726 procesos de incapacidad temporal, lo que supone un incremento del 34,6 por ciento frente a los contabilizados en el mismo periodo de 2019, cuando se registraron 7.966.

Si los datos se analizan por áreas de salud, la Murcia-Oeste, que tiene como centro de referencia el Hospital Virgen de la Arrixaca, es la que acumula más bajas, con 2.925, frente a las 2.335 del pasado año. Al Área I le sigue la II (Cartagena), donde se han tramitado durante la pandemia 2.071 procesos de incapacidad temporal, frente a los 1.631 del año 2019; seguida también del Área VI (Morales Meseguer), con 1.245; y el Área VII (Reina Sofía), con 1.149.

Los menos afectados han sido el Centro de Bioquímica y Genética Clínica, con 11 casos, y el Centro Regional de Hemodonación, con 26.

Respecto al tipo de contingencia que ha motivado esas incapacidades temporales de los trabajadores del SMS, la más habitual ha sido la enfermedad común, con 7.682 casos. Aunque sufre un descenso entre marzo y septiembre de este año respecto a los mismos meses de 2019, cuando se contabilizaron 8.513 procesos de este tipo.

Lo llamativo es que las incapacidades temporales sin subsidio se han multiplicado exponencialmente, ya que han pasado de sólo 43 en los seis meses que se han tomado como referencia el pasado año a un total de 3.175 en el mismo periodo de este ejercicio.

Enfermería, la más castigada

Los datos sobre bajas laborales durante la pandemia en el Servicio Murciano de Salud a los que ha tenido acceso LA OPINIÓN ponen de relieve que los profesionales de enfermería y auxiliares de enfermería son los que se han llevado la peor parte, ya que sólo estos dos grupos concentran más de la mitad de todas las incapacidades laborales que se han tramitado.

Por categorías profesionales, enfermería ha presentado 3.778 bajas entre marzo y septiembre de este año, frente a las 2.712 contabilizadas en los mismos meses de 2019. Le siguen los auxiliares de enfermería, con 3.155 procesos de incapacidad temporal; celadores, con 1.286; auxiliares administrativos, con 908; médicos de familia, con 459; médicos de Urgencias de Atención Primaria; y técnicos de laboratorio, con 234, entre otros.

No obstante, el último informe del Servicio de Epidemiología recoge que desde el pasado 10 de mayo han sido 464 los profesionales sanitarios que se han contagiado de covid, de los que 123 han sido enfermeros, 118 auxiliares de enfermería y 51 médicos.

Desde los sindicatos han advertido desde el inicio de la pandemia de la exposición de estos trabajadores al virus, ante lo que se han reclamado más medios de protección y protocolos con los que reducir el riesgo. Desde el sindicato de enfermería Satse se llegó a denunciar ante la Inspección de Trabajo la «falta de protección» de los enfermeros, mientras que el sindicato médico Cesm acudió incluso a los tribunales e interpuso una demanda por la escasez de material de protección en los primeros días de la pandemia.