De la Filología Inglesa a la Enología y la Viticultura. Nunca es tarde para llevar a cabo lo que uno sueña. ¿Cuándo supo que quería hacer del vino su proyecto personal?

Si te contesto que fue por amor y que lo supe desde la primera mirada suena todo muy cursi, ¿verdad? Conocí a José Luis un mes de septiembre (¡hace ya 13 años!) y en octubre ya estaba haciendo mi primera visita a una bodega. El camino ha sido muy intenso, ha conllevado mucho esfuerzo, días interminables de trabajo y estudio, pero ha sido también apasionante y enriquecedor.

Nueve años después tengo la suerte de poder decir que se ha cumplido mi sueño: elaboramos grandes vinos, en nuestra tierra, en Murcia, en un entorno único, como es el Paraje de La Raja, en una bodega preciosa construida con mucho esfuerzo y con un equipo de profesionales maravilloso.

¿Qué barreras se ha encontrado a la hora de llevar a cabo su negocio?

El sector vitivinícola tiene unas barreras de entrada fuertes, es un mundo muy tradicional, donde los proyectos innovadores son siempre acogidos con mucho recelo. En España, esa ha sido quizás la mayor traba, ser joven, empezar de cero, no contar con años de historia€ Afortunadamente, los consumidores internacionales han sabido desde el primer momento valorar nuestros vinos por su calidad y nos han elegido para maridar sus platos en los mejores restaurantes.

¿Ha sufrido, o conoce a alguien cercano que haya sufrido discriminación a la hora de promocionar en su trabajo por ser mujer?

No. No creo que en el mundo de la empresa a día de hoy la mujer sufra discriminación por ser mujer. Lo que sí es una realidad, es que la promoción implica dedicación, y la dedicación al trabajo implica más tiempo fuera del hogar familiar. En la conciliación es donde existe el gran problema. La mujer suele priorizar la familia al trabajo en mayor medida que el hombre.

¿Las ayudas a la conciliación son suficientes? ¿A qué retos se enfrenta la mujer trabajadora?

El mayor reto sigue siendo no tener que renunciar a la familia. La conciliación es la asignatura pendiente que tenemos en todas las empresas. Es muy complicado gestionar el horario familiar con el ritmo de la actividad en la empresa. Aquí tenemos todos mucho recorrido por delante y no hay fórmula mágica.

¿Cómo definiría la situación de la mujer en el mercado laboral de la Región de Murcia? ¿Cree que existe igualdad?

A mí personalmente me gusta hablar de igualdad de oportunidades y no de igualdad en sí. La Región de Murcia es tierra de emprendedores, de personas valientes que sueñan con formarse su propio futuro. Hoy en día me enorgullece que muchas de esas personas seamos mujeres y que hayamos sido capaces de demostrar que estamos perfectamente cualificadas para conseguir aquello que nos propongamos independientemente de nuestro género.

En su opinión, ¿es competencia de gobiernos y empresas llevar a cabo iniciativas y mejoras para lograr la verdadera igualdad o es más urgente un cambio de mentalidad entre la sociedad?

Las políticas actuales sólo consiguen enfrentar a hombres y mujeres. El empoderamiento femenino no se puede conseguir demonizando al género masculino, creo que en ese sentido estamos cometiendo un grave error. No es cuestión de ser iguales, es cuestión de aprender a valorar lo que nos hace diferentes. Mi marido es el motor, yo soy el embrague y el freno. No somos iguales, pero sí igual de necesarios.

Usted está muy familiarizada con el evento eWoman. En 2018 fue galardonada con el premio al Arte Digital y RRSS. ¿Qué supone para usted este tipo de reconocimiento?

El reconocimiento a tu trabajo es muy reconfortante. Fue un premio que me hizo muchísima ilusión porque, además, en Casa Rojo somos firmes defensores de las redes sociales y de la fortaleza de las mismas como herramienta de comunicación en una empresa. Son un altavoz súper potente, que te permite llegar al mundo entero, contarle quién eres, qué haces, cómo lo haces y porqué.

En estos premios se valora la valentía y el talento de las mujeres emprendedoras, como usted. ¿Animaría a las murcianas a que emprendan?

¡Rotundamente sí! Sin lugar a dudas. Dedicarte a lo que te apasiona es quizás la mejor decisión que uno puede tomar en su vida. La mujer es emprendedora de forma natural, lo demás llega sólo con esfuerzo, dedicación y mucha ilusión.

Su intervención en eWoman Murcia

Laura comenzaba su ponencia deseando poder, con sus palabras, «poner un granito de arena para todas aquellas mujeres que quieran cumplir su sueño y ser felices». Como hizo ella. «Yo tengo la suerte de decir que hoy día me dedico a lo que me gusta, a mi pasión, que es el mundo del vino». Conectada desde el Paraje de la Raja, en medio de la montaña, Laura habla de su negocio, Casa Rojo, que fue elegida segunda mejor bodega en España y mejor bodega abierta al turismo.

«Pero hasta que he llegado aquí ha sido una trayectoria intensa, y no ha sido todo tan fácil», insiste Laura, quien recuerda cómo fue su entrada al mundo vinícola. «Me enamoré de José y me enamoré del mundo del vino, tan apasionante, pero a la vez tan masculino. Tiene muchas barreras de entrada, es muy clásico... Para mí lo fácil hubiese sido que lo hubiese hecho mi marido solo, pero no quise ser menos, yo pensé que tenía la capacidad y la ilusión de aprender del sector».

Comenzó un largo camino que incluyó muchos viajes para conocer otras bodegas, y cumplir el sueño de tener la suya propia, «y no paramos hasta que lo conseguimos». «Ese sería mi consejo principal, no aceptar un 'no' por respuesta. Seguir luchando y esforzándote hasta conseguir tu objetivo, si tienes muy claro lo que quieres, porque con trabajo e ilusión es posible. Os animo a todas a hacerlo».

Respecto a temas de igualdad, Laura es partidaria de que «las personas somos personas» y destaca que ella tuvo «la suerte» de tener como complemento a su marido y su equipo, pero «nunca me he olvidado que yo, como mujer, podía llegar hasta donde ha llegado cualquiera de los hombres de este sector».

Perfil de Laura Muñoz-Rojo

Laura Muñoz-Rojo nació en Balsapintada, Fuente Álamo. Se licenció en Filología Inglesa por la UMU, pero después dio un giro a su vida apostando por un máster en Comercio Exterior y formándose en Enología y Viticultura en la Universidad Miguel Hernández de Elche, pero si volviera atrás, «repetiría el ciclo», asegura. A los 16 años pasó su primer verano en Inglaterra estudiando inglés «y desde entonces me enamoré de la cultura anglosajona. Después me fui a Estados Unidos, allí solicité acceso a los cursos para extranjeros en la Universidad de Pensilvania y me aceptaron en la facultad de Empresa. Me apasionaba viajar, descubrir otras culturas».

Esta mujer inquieta y emprendedora ha vivido en Inglaterra, Estados Unidos, México y fue en Japón donde, junto con su marido José Luis, iniciaron su proyecto personal, «y hoy en día hemos cumplido el sueño de tener una bodega preciosa, en un rincón único en el altiplano murciano, en el Paraje de La Raja». En 2018 fue galardonada con el premio eWoman al Arte Digital y RRSS, un reconocimiento «que me hizo mucha ilusión», declara Laura.