CC OO investiga a un segundo intermediario con las empresas de la agricultura acusado por mujeres de origen marroquí de obligarlas a mantener relaciones sexuales a cambio de reclutarlas para trabajar. El sindicato ya había presentado una denuncia contra otro encargado, que ha sido detenido después de que cinco temporeras lo hayan acusado de agresiones y abusos sexuales. Añade que, además de someter a sus víctimas a todo tipo de abusos, les descontaba siete euros en concepto de transporte de los 20 que le entregaban las empresas para las que trabajaban, por lo que veían reducido su jornal a 13 euros.

Teresa Fuentes, secretaria general de la Federación de Servicios de CC OO, y Alejandra García, secretaria de la Mujer de la Federación de Industria, que comparecieron ayer en rueda de prensa junto a los secretarios generales del sindicato, Santiago Navarro, y de la Federación de Industria, Enrique Bruna, explicaron que tuvieron que entrevistarse dentro un coche con las temporeras que han aceptado declarar por miedo a represalias.

La Guardia Civil informó el lunes de que a raíz de la denuncia del sindicato abrió una investigación sobre la actuación del intermediario que les facilitaba su incorporación laboral y que, además, las trasladaba hasta las fincas. El pasado sábado, «ante las sospechas de que pudiera cometer una nueva agresión sexual», la Benemérita se desplazó a la finca de la diputación cartagenera de La Palma a la que solía llevar a las víctimas y lo detuvo.

Los dirigentes sindicales aseguran que el caso del encargado detenido por la Guardia Civil por los delitos de agresión sexual, abuso sexual «no es un hecho aislado», sino un 'modus operandi' habitual en el campo. La víctimas son «mujeres que se encuentran en una situación de vulnerabilidad», porque carecen de permiso de trabajo y no conocen el idioma ni saben para qué empresa trabajan cada día. «A veces las contratan con el nombre de otra mujer en situación regular» para sortear las inspecciones.

Teresa Fuentes aseguró que llegan a ser «forzadas en medio del bancal, en presencia de sus compañeras», y que se veían sometidas a un acoso constante. Añadió que una de las cinco denunciantes ha sido expulsada de la casa en la que vivía con unas compañeras, «porque la acusan de haber accedido a declarar contra el encargado para conseguir la regularización».

Por su parte, la secretaria de la Mujer de la Federación de Industria señaló que el chantaje al que se ven sometidas las inmigrantes para conseguir que las contraten «es algo que está casi normalizado».

De hecho, la secretaria de la Federación de Servicios explicó que las pesquisas se iniciaron a raíz de las quejas contra otro intermediario que también exige sexo a cambio de trabajo y que «no contrata a las mujeres que no aceptan», por lo que no se descarta que la investigación pueda dar lugar a otra detención.

Fuentes dijo que algunas «han trabajado antes en la fresa de Huelva», un sector que también ha dado lugar a denuncias, y anunció que pedirán que se les conceda el asilo.

Santiago Navarro recordó que el sindicato ya reveló la existencia de abusos en la contratación de temporeras de Torre Pacheco en 2007, pero las mujeres no llegaron a prestar declaración, por lo que no llegó a presentarse denuncia alguna. Vincula las agresiones que han llevado a la detención del intermediario de La Palma con «la precariedad y la economía sumergida, que ronda entre el 25% y el 30% en la Región».