La doctora del Servicio de cirugía general y del aparato digestivo del hospital Virgen de la Arrixaca María Dolores Frutos ha advertido este martes en un comunicado que su trabajo ha pasado a ser sólo para atender urgencias quirúrgicas en las guardias, para dispensar consultas telemáticas y para ayudar al resto de especialidades médicas contra la Covid-19, siendo relegados los servicios quirúrgicos "a un último lugar" y los cirujanos han dejado prácticamente de operar.

"Se ha reducido la actividad quirúrgica a menos de la mitad, e incluso se plantea anularla por completo. De unos 20 quirófanos semanales hemos pasado a 4 y, seguramente, puede que en las próximas semanas no dispongamos de ninguno por la evolución de la pandemia en nuestra Comunidad", añade esta doctora que es también profesora asociada de la Universidad de Murcia.

Según esta especialista en Cirugía Bariátrica y Laparoscópica, hay pacientes oncológicos o con otras patologías no oncológicas que amenazan seriamente la salud que si no se operan pueden tener graves consecuencias.

A juicio de esta especialista, "los gerentes hospitalarios hacen lo que pueden; siguen los modelos de predicción para no colapsar el hospital, dejando camas, respiradores, quirófanos y salas de reanimación libres por el aumento de casos positivos, aunque parece que la gravedad y mortalidad es algo inferior que en marzo".

La realidad es que muchos pacientes en lista de espera quirúrgica siguen sin poder operarse, "y esto es muy grave: aumentan las complicaciones, empeora el pronóstico y disminuye la supervivencia de los pacientes que precisan un tratamiento quirúrgico". añade.