El gerente del Área III de Salud de Lorca y del hospital Rafael Méndez, Enrique Casado, ha reconocido este miércoles que la Unidad de Cuidados Intensivos de este centro hospitalario, el de referencia en la comarca del Guadalentín, es «muy complicada».

Según ha explicado, el incremento del número de casos graves de coronavirus ha obligado a hacer «adaptaciones» del área de UCI adoptando soluciones a través de distintos planes de contingencia «porque nadie pensaba que íbamos a tener estas necesidades».

Cuando la segunda ola de la pandemia comenzó a afectar con intensidad a la comarca de Lorca se incorporaron a las ocho plazas de UCI las seis de la unidad de recuperación postanestésica de los quirófanos.