El rector de la Universidad de Murcia, José Luján, y la vicerrectora de Planificación de Infraestructuras, Belén López, han acompañado este lunes al alcalde de Murcia, José Ballesta, en la visita que él y parte de equipo de gobierno municipal han hecho a las obras que se están llevando a cabo en el acceso al Campus de Espinardo desde la autovía A-30, que suponen la construcción de una nueva rotonda, la cual evitará las retenciones ocasionadas en la entrada y salida al campus.

La rotonda conectará la salida 136 de la A-30 con el complejo universitario, la carretera de Madrid y la Avenida Severo Ochoa, y disminuirá los problemas de circulación, reorganizando el tráfico y evitando que miles de vehículos tengan que llegar hasta la entrada del campus para dirigirse al polígono industrial de la zona, a la urbanización de Los Rectores y al centro comercial Myrtea (antes llamado El Tiro), que, como ha desvelado esta redacción, cerrará antes de final de año.

Las obras, que comenzaron el pasado julio y fueron adjudicadas por un importe de 419.625,69 euros, tienen un plazo de ejecución de cinco meses, por lo que se prevé que finalicen a finales de año. Los trabajos previos a la demolición del pavimento existente ya se han iniciado aprovechando la disminución del tránsito en la zona durante el periodo estival.

La puesta en marcha de este proyecto tan demandado por la comunidad universitaria ha sido posible gracias a colaboración entre el Vicerrectorado de Planificación de las Infraestructuras, dirigido por Belén López; la Concejalía de Infraestructuras, Obras y Servicios Públicos, encabezada por el concejal de Fomento, Mario Gómez; y Demarcación de Carreteras del Estado en Murcia, del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.