Que los días de confinamiento territorial pasen lo más rápido posible y que la normalidad vuelva a las aulas. Esta es la idea principal que corre por los centros educativos de Jumilla ante el malestar creado entre la comunidad docente por el comienzo del curso escolar online tras la vuelta a la fase 1 flexibilizada del municipio. El cuerpo docente y los equipos de dirección no están en contra de las medidas tomadas por Salud Pública para el municipio con el fin de frenar la propagación del virus, sino de que se les obligue a asistir presencialmente a los centros mientras los alumnos están con la enseñanza telemática.

La falta de medidas de conciliación para los propios docentes que tienen hijos, así como la falta de recursos tecnológicos para hacer seguimiento de los alumnos han sido los principales problemas que estos profesionales han puesto encima de la mesa. Estas quejas fueron remitidas a la Consejería de Educación en una reunión que mantuvieron los equipos directivos con este departamento. Los colegios de Infantil y Primaria, quienes serán los primeros en comenzar las clases, no disponen de ordenadores ni de cámaras webcam suficientes para dar las clases.

En uno de los centros de Jumilla consultados, con casi 300 alumnos en sus aulas, hay cuatro portátiles para 25 maestros. Otro problema es la red wifi de estos centros, insuficiente para dar conexión a todos los dispositivos a la vez. Aseguran que podrán hacer seguimiento de los menores por teléfono y los padres podrán ir a los centros a recoger el material educativo y deberes.