En sus casi treinta años de actividad, el Centro Regional de Hemodonación nunca se había enfrentado a una situación tan complicada como la que estamos viviendo actualmente a causa de la pandemia, que ha hecho que «las reservas de componentes sanguíneos caigan más de lo normal».

«La situación está muy complicada. No hemos parado de trabajar ni un solo día desde que empezó el estado de alarma», declara Antonia Gómez Simón, enfermera y responsable del Departamento de Promoción del Centro de Hemodonación. «Durante el confinamiento trabajábamos con cita previa y mandábamos un mensaje vía SMS y WhatsApp a los donantes para darles confianza y que no tuviesen problemas con los cuerpos y fuerzas de seguridad».

A pesar de ello, las donaciones han disminuido en estos meses. «Las necesidades que tenemos en la Región son alrededor de 200 o 250 donaciones de sangre al día, algo a lo que se recaudaba antes de la pandemia» a lo que Gómez Simón confirma que «desafortunadamente no llegamos». Tras iniciar la nueva normalidad «estamos consiguiendo una media 150 o 160 donaciones diarias», una cifra que se encuentra por debajo de lo necesario.

«La demanda de los hospitales sigue siendo importante al margen de que se hayan reducido las cirugías. Las operaciones y las urgencias se siguen atendiendo y los enfermos de oncología y hematología siguen necesitando a diario transfusiones de hematíes y plaquetas», manifiesta Antonia Gómez.

«Hemos pasado unas semanas bastante difíciles en cuanto a las reservas, ya que bajó mucho el nivel de los grupos 0(-) y A(-). -explica Antonia Gómez-. Ahora mismo tenemos unos niveles aceptables, excepto de Rh(-) que están en nivel naranja, pero seguimos necesitando donaciones porque nadie asegura que esto no cambie de un día para otro».

Desde el Centro Regional de Hemodonación «somos conscientes de la situación que estamos viviendo, pero queremos que la gente sepa que donar sangre es completamente seguro, y que se hace en entornos también seguros».

Por un lado, «concretamos una cita previa con el donante en el punto que le sea más cercano. Hasta ese momento, estamos en contacto con ellos para solucionar cualquier duda», explica una enfermera del centro.

«Cuando llega el día de donar, intentamos en primer lugar evitar las aglomeraciones, y dotamos al donante de mascarilla, gel hidroalcohólico y guantes, aunque preferimos el lavado de manos antes y después. Se utilizan además fundas de cama de un solo uso por lo que es un acto cien por cien seguro».

Actualmente, las donaciones tienen distintos puntos para llevarse a cabo, el Centro de Hemodonación de Murcia, el de Cartagena y los distintos puntos móviles instalados en los 45 municipios de la Región, que se establecen en dos o tres lugares cada día.

«Además, algunas empresas y sus trabajadores se ofrecen como donantes y vamos allí los enfermeros a hacer la colecta», cuenta Antonia.

El centro insiste en que «donar sangre es un acto solidario de una importancia vital, ya que con cada donación se ayuda a tres personas que lo necesitan». Además, es la única forma de conseguirla, ya que sin ella la actividad sanitaria sería prácticamente imposible en muchos aspectos porque es algo esencial.

Llamamiento a los donantes

En lo que llevamos de año, se ha atendido a 37.856 personas que han acudido a donar sangre, la mayoría de ellos donantes habituales, frente a los 40.139 del año pasado, lo que corresponde a un 6% menos de donaciones de un año para otro. Además, también ha variado la cifra de nuevos donantes obteniendo este año un total de 597 menos que en 2019.

A causa de esto, el Centro Regional de Hemodonación hace un llamamiento a los ciudadanos para que acudan a donar sangre, pidiendo que desaparezca el miedo al contagio gracias a la seguridad de sus actuaciones y recuerda la satisfacción que produce llevar a cabo este acto de humanidad.