La fiscalía ha pedido tres años de prisión para un octogenario que va a ser juzgado la próxima semana en la Audiencia Provincial de Murcia acusado de abusar presuntamente de una niña cuando la registró con la excusa de que quería saber si llevaba petardos encima.

Las conclusiones provisionales de la fiscalía señalan que los hechos ocurrieron supuestamente a mediodía del 21 de junio de 2018 en un jardín de la pedanía murciana de Beniaján, en la que el acusado se acercó a un banco donde había sentados varios menores, entre ellos, la víctima, de 12 años entonces, y lanzó un petardo para responsabilizarlos de ello.

Acto seguido les dijo que se levantaran para comprobar quién llevaba petardos "y guiado por el ánimo de satisfacer su libido, como una permaneció sentada, se acercó a ella e introduciendo su mano en el bolsillo delantero del pantalón corto que vestía le efectuó tocamientos en la vagina".

El fiscal pide también para él una orden de alejamiento durante dos años a menos de 300 metros de la menor.