«Nosotros estamos dispuestos a ayudarte a recuperar tu vivienda, porque nos costó construirla y llenarla de felicidad para que alguien venga y nos la arrebate. Da igual la parte de España que estés, nuestro sofisticado equipo lo conseguirá, llevamos mas de 120 viviendas recuperadas». Así se expresan desde Services Exclusives, una empresa de desalojos con sede en la localidad murciana de Lo Pagán. «Nos dedicamos a la recuperación de viviendas en situación de impago de forma efectiva, fácil y rápida», subrayan desde la empresa, al tiempo que añaden que «hemos juntado un grupo de especialistas para ayudarte en este proceso para recuperar tu vivienda con la mejor fórmula».
Iban Carrillo, propietario de Services Exclusives, explica que la idea de poner en marcha en la Región una empresa de estas características nació porque «nos dimos cuenta de la necesidad de clientes que se quedaron sin casa un largo tiempo, porque la Justicia fue muy lenta, e indagamos en cómo poder ayudarles».
El debate de la okupación vuelve a estar en la calle. Distintos partidos han propuesto cambiar la ley para que haya desalojos rápidos. Vox directamente apuesta por dar «una patada en el culo» a quienes entren a vivir en una casa que no es suya. El PP pide que se desaloje a los okupas en 48 horas y tengan penas de cárcel.
Preguntado por si cree que la norma será cambiada, Carrillo contesta que «esto solo son planes que tienen los políticos por hablar de un tema que está en auge, fanfarronear».
En cuanto a si existe un perfil del okupa, el responsable de Services Exclusives apunta que «es un dejado, una persona a la que no le importa lo de los demás y encima se ríe si le reclaman lo que no es suyo». Estas personas «aprovechan la larga temporada fuera de vacaciones para okupar viviendas y es su modus operandi habitual», manifiesta, y añade que «a nivel nacional, hay como unas 33 okupaciones diarias».
Pensando en ampliar equipo
En España se producen miles de okupaciones al día, dice. A la pregunta de cuáles son las partes de la Región de Murcia en las que tienen más trabajo, Carrillo comenta que «zonas costeras sobre todo, destinos turísticos o barrios muy deshabitados por los dueños extranjeros que se marchan una temporada a su país», circunstancia que aprovechan los okupas para usurpar el domicilio.
A la cuestión de cuánto costaría a una persona contratar los servicios de la empresa para que le desokupen la casa, precisa que el precio « va en función de el trabajo que nos cueste y las personas que ocupan la vivienda afectada».
La empresa pinatarense tiene lista de espera, habitualmente «de dos a tres semanas», ya que «hay que tener en cuenta que se están haciendo algunos días hasta cuatro desalojos», aunque la media es «entre dos y tres actuaciones al día». «La lista de espera llega a ser de un mes o de mes y medio», detalla, por lo que Carrillo se plantea «ampliar el equipo», que ahora mismo está formado por una treintena de personas.
