La irrupción del coronavirus en la sociedad ha obligado a reorientar y poner en marcha centenares de investigaciones científicas para esclarecer aspectos como el desarrollo de anticuerpos, cómo afecta la enfermedad a adultos o a niños y la búsqueda de una vacuna contra el SARS-CoV2, entre otras. Investigaciones, muchas de ellas, que precisan de muestras de pacientes contagiados y sanos para poder seguir adelante.

En este punto es donde adquiere un papel fundamental el trabajo que viene desarrollando desde hace meses el Biobanco del Instituto Murciano de Investigaciones Biosanitarias (IMIB) de la Arrixaca, donde hasta el momento se han recogido más de 6.000 muestras, a disposición de cualquier equipo de investigación de la Región de Murcia o de otras comunidades autónomas.

La jefa del Biobanco del IMIB, Teresa Escámez Martínez, explica a LA OPINIÓN que llevan recogiendo muestras desde el principio de la pandemia, aunque tuvieron que hacer un parón las primeras semanas para ceder sus EPI (equipos de protección individual) a otros compañeros que los necesitaban más en esos momentos. Entre ellas hay muestras de pacientes que han estado ingresados, a quienes se les pidió el consentimiento, así como de otras que han llegado de donantes, de los que ya hay cerca de 700 en toda la Región.

Escamez reconoce que les gustaría sumar también las muestras de Atención Primaria, «ya que así contaríamos con más material para investigación», teniendo en cuenta que desde los centros de salud se hace seguimiento a muchos contagiados que pasan la enfermedad en casa.

Entre las muestras que recoge el Biobanco del IMIB hay de suero, de plasma, de ADN, células de saliva y exudados, muestras que se usarán en proyectos actuales y futuros. «Los investigadores quieren saber por qué hay pacientes que se complican y otros no, qué diferencias hay entre los asintomáticos, los leves y los que requieren ingreso y para ello debemos tener muestras que representen a todos los casos».

El Biobanco del IMIB comenzó a funcionar en el año 2010 y el coronavirus ha impedido que sus miembros puedan conmemorar esta primera década. En él trabajan actualmente ocho profesionales y cuenta con tres nodos en los hospitales Virgen de la Arrixaca, Morales Meseguer y Santa Lucía. «El balance de este tiempo es bueno, hemos evolucionado gracias a la implicación del IMIB, que ha permitido que los investigadores nos conozcan», indica su responsable.

Además de las miles de muestras de pacientes covid, estas instalaciones también cuentan con las que se han tomado a pacientes con distintos tipos de cáncer, muestras ginecológicas, cardiológicas, así como de población sana o de familiares, para poder comparar.

El Biobanco murciano forma parte de la Red Nacional de Biobancos, en la que se integran 39 centros, y que depende del Instituto de Salud Carlos III, coordinado por la directora del Biobanco de Mallorca.

Con la llegada de la pandemia son muchos los grupos que han reorientado sus líneas de investigación y que plantean numerosas iniciativas para avanzar tanto en el conocimiento de los mecanismos que emplea el virus para provocar la infección como en posibles tratamientos. Y esta recogida de muestras por parte del Biobanco es el primer paso, clave en el desarrollo de estos estudios. Actualmente ya está dando soporte a los ensayos clínicos aprobados por la Agencia Española del Medicamento que se han iniciado en los hospitales de la Región, a la espera de que se sumen nuevos proyectos en los próximos días.