El consejero de Agricultura, Antonio Luengo, visitaba esta semana una finca jumillana para comprobar sobre el terreno las tareas de recolección de los frutos de la Denominación de Origen Protegida 'Pera de Jumilla', basada en la variedad 'ercolini'. De esta fruta se espera este año una cosecha de alrededor de cinco millones de kilos, de los que un millón, aproximadamente, se acogerán a la producción certificada, «con una calidad muy buena», indica Luengo. El consejero ha subrayado la relevancia de las Denominaciones de Origen «como garantía de calidad de un producto alimentario, como es el caso de la pera jumillana, o de una bebida, como sucede con el vino de esta tierra».