El Ayuntamiento de Murcia ha comenzado a aplicar las medidas que aprobó el jueves en su última reunión del Comité de Salud Pública y entre las que se encuentra el dotar de equipos EPI (equipo de protección individual) a los trabajadores de las salas de estudio municipales, así como a los que se encuentren en las oficinas de atención al ciudadano. Precisamente, en las salas de estudio se ha garantizado la distancia de seguridad, cuarentena en el préstamo de ejemplares y reducción de horario.

El documento aprobado por el Comité de Salud Pública recoge las medidas que se aplicarán en la capital para garantizar la seguridad y contener los contagios de cara a la vuelta a la actividad en todos los sectores en septiembre.

La Policía Local incrementará la vigilancia para garantizar el cumplimiento de las normas establecidas por las autoridades para hacer frente a la pandemia, tales como el uso obligatorio de mascarilla, la reducción de aforo en los vehículos privados para las personas no convivientes y los límites de horario de cierre y aforo decretados para los establecimientos.

Asimismo, los técnicos de los Servicios de Salud elaborarán informes rutinarios que permitirán tener una radiografía exacta de la evolución de la pandemia dentro del municipio y adaptar las respuestas que resulten más efectivas. El Ayuntamiento mantendrá un contacto fluido con el Gobierno regional para la ejecución de medidas específicas.

La actuación policial también vigilará que no se produzcan aglomeraciones ni concentraciones y multará a aquellos que realicen botellones en la calle. El trabajo de los agentes ya ha permitido que se disuelvan concentraciones de personas que se producían de forma espontánea los fines de semana en puntos de Barriomar, en la FICA y en el entorno de la rambla de Torreagüera.

El Ayuntamiento también ha previsto que una brigada de 500 profesionales desinfecten parques y jardines.