Las grandes empresas de trabajo temporal (ETT) de la Región se sienten en el punto de mira de las denuncias laborales. La patronal nacional Asempleo, de la que forman parte ocho de las mayores ETT que operan en Murcia, defiende a las compañías del sector de las críticas provocadas por los casos de fraude y abusos que salen a la luz periódicamente y sostiene que están pagando justos por pecadores.

La organización afirma que las grandes empresas están aplicando ya «el segundo código ético y de buenas prácticas en el sector» y aconseja a las administraciones responsables de garantizar la seguridad y las condiciones laborales que pongan el foco en «la gran bolsa de economía sumergida que supera con creces el 20%» de la actividad económica.

La mala fama de las prácticas laborales exigentes en la Región se ha visto acrecentada por las críticas de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que llegó a hablar de «condiciones de esclavitud en el campo», lo que llevó a los agricultores a exigirle una rectificación. Sin embargo, tras la muerte de un temporero en Lorca a consecuencia de un golpe de calor la ministra ha tachado de «deplorables» las condiciones a las que se han visto sometidos los trabajadores en la empresa del jornalero fallecido por estrés térmico y aseguró que este suceso «habla muy mal» de España.

En la Región hay unas 60 ETT, aunque Asempleo sostiene que las grandes compañías afiliadas a esta organización patronal representan el 80% del mercado. La mayor parte se dedica a suministrar trabajadores a las empresas del campo y del sector agroalimentario, pero en los últimos años han extendido su actuación a muchas actividades del sector servicios, como la hostelería. Estas empresas siempre han tenido en Murcia una presencia muy superior a la alcanzada en el resto de comunidades autónomas, pero después de la crisis de 2008 han mantenido un crecimiento vertiginoso que les ha permitido multiplicar casi por cuatro el número de contratos de puesta a disposición.

Según los datos recogidos en la Memoria del Consejo Económico y Social (CES) del pasado año, entre 2009 y 2019 la cifra de contratos firmados por la ETT en Murcia ha pasado de 139.952 a 533.817.

Este medio millón largo representa el 54% de todos los contratos temporales que hacen las empresas de la Región, lo que equivale a 25 puntos más respecto a 2009.

La patronal de las ETT asegura que las grandes empresas adscritas representan «cerca del 80% sector de la intermediación privada y, por tanto, como patronal única y de más representación del sector debe, y así lo hace, defender y asegurar el estricto cumplimiento de la ley para sus empresas representadas».

Asempleo sostiene que sus asociadas aplican « los salarios que corresponden por convenio a la empresa en la que realiza la actividad, cumpliendo además con todos los estándares de calidad, todo ello bajo el paraguas del reconocimiento normativo europeo y nacional pertinente». Sin embargo, la organización muestra su «preocupación por todas las denuncias y casos de fraude laboral, de condiciones de vigilancia de la salud, prevención de riesgos laborales y de cesión ilegal de trabajadores que se están dando en la Región».

Atribuye estas prácticas fraudulentas a falsas ETT que se dedican a facilitar trabajadores a las empresas sin estar autorizadas. «Hay que poner el foco tanto en estos mecanismos como en los destinados a destapar prácticas ilegales de empresas que actúan como empresas de trabajo temporal, sin serlo, y actuar directamente sobre la gran bolsa de economía sumergida que supera con creces el 20% de la economía».

Un portavoz de Asempleo que las inspecciones a las que se ven sometidas deben dirigirse hacia las empresas que operan sin estar autorizadas. Apuntó que su pretensión es que «se utilicen todos los mecanismos que ya se están aplicando, tanto por parte de la Inspección y los Servicios Públicos de Empleo como del Ministerio de Trabajo» para destapar las malas prácticas.