El número de investigados por el presunto caso de corrupción que se habría cometido con la adjudicación a dedo de contratos en la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) se eleva ya a 34, que han sido llamados a declarar en esa condición el próximo diciembre en el juzgado de instrucción de Murcia que dirige las actuaciones seguidas contra ellos. Entre los investigados se encuentran la ex secretaria general de la CHS Paloma Moriano y el excomisario de Aguas Manuel Aldeguer, que han sido citados para el 10 de diciembre. Al día siguiente pasará por el juzgado instructor la expresidenta de este organismo de cuenca Rosario Quesada, mientras que el 14 de diciembre lo harán el exsecretario general de la CHS José María Bernabé y el exdirector técnico Joaquín Ezcurra. Esta ronda de declaraciones comenzará el 2 de diciembre, con la citación de un antiguo funcionario del citado organismo y varios miembros de su familia que, según las investigaciones, pusieron en marcha dos empresas, igualmente investigadas, a través de las cuales, presuntamente, se habrían canalizado las adjudicaciones.

La investigación realizada por la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) calcula que el total del dinero presuntamente malversado podría llegar a los seis millones de euros. Este presunto caso de corrupción afloró con el registro efectuado en noviembre de 2018 por los agentes policiales en la sede de la CHS en Murcia, donde se incautaron de diverso material. Una carta anónima que denunció la adjudicación preferente a determinadas empresas vinculadas personalmente con la CHS y el aumento de contratos menores en el último trimestre de 2017 dio inicio a la investigación en septiembre de 2018, según la policía. La investigación trata de determinar la supuesta participación de cada uno de ellos y si los ex altos cargos son responsables en alguna medida de los hechos por acción u omisión.