«No podemos entender que frente a las medidas tomadas en otros ámbitos de la administración, en el ámbito del ocio, en el familiar y en el conjunto de las relaciones sociales, se obligue a alumnos y profesores a compartir espacios reducidos durante seis

horas diarias dando por hecho que el uso de la mascarilla y el lavado de manos será prevención suficiente para minimizar el riesgo de contagio». La dura carta hecha pública por un instituto de Cartagena, en concreto el IES Pedro Peñalver de El Algar, sigue mostrando el descontento de estos centros educativos con respecto a las medidas sanitarias que deben adoptar de cara al próximo curso y que se perpetúa por culpa de la «incapacidad» que tienen para implantarlas en sus aulas.

Junto a este centro, otros dos institutos cartageneros, el IES San Isidoro y el IES Los Molinos, han mostrado su rechazo en sendos escritos que dirigen a la Consejería de Educación contra su guía sanitaria planteada junto al departamento regional de Salud y contra el Plan de Continuidad de la Actividad Educativa 2020-2021.

Estos centros critican, entre otras cosas, que no se bajen las ratios de alumnos y profesores por aula el próximo curso, que no se dispone de más aseos o profesores, que no hay un adulto acompañante en los autobuses y que no se aumentan los servicios de limpieza. Sin embargo, señala que sí se les exige «que a la más mínima sospecha de un positivo en nuestras aulas avisemos a la persona de referencia del centro de salud más cercano, porque se supone que sabemos identificar los síntomas de la covid-19, porque se supone que hemos de saber de todo».

Consideran un «peligro manifiesto» que coincidan en un aula «30 personas cada hora, incluso suponiendo que todo el alumnado pueda disponer diariamente de sus propias mascarillas». Piden, por todo ello, que se proporcionen los medios y las condiciones imprescindibles para el desarrollo del próximo curso «donde se vele por la salud de los trabajadores y alumnos».