Rosalía H. M., la mujer atacada brutalmente con un martillo en Cartagena, presuntamente a manos de su esposo, sigue ingresada con pronóstico muy grave, infican fuentes sanitarias.

Horas después del ataque, la mujer, de 62 años, era operada en el Virgen de la Arrixaca de Murcia, donde los sanitarios se afanaban en salvar su vida. Mientras, su marido, Juan M. G., permanecía en los calabozos de la Comisaría de la Policía Nacional, en calidad de detenido tras intentar matarla. Este individuo, de 69 años, ya está en prisión provisional.

Fue el propio sospechoso el que avisó por teléfono a Emergencias de lo que había hecho. El escenario del ataque, una vivienda ubicada en el número 21 de la calle Príncipe de Asturias, en el casco urbano de la ciudad portuaria. En su llamada, el hombre detallaba que su esposa se encontraba malherida y pedía atención sanitaria urgente. Y confesaba que él mismo era quien había dado con un martillo a su mujer.

Así las cosas, a la vivienda se movilizaron, además de agentes de la Policía Nacional, sanitarios en una unidad médica de emergencias (UME), que, viendo la gravedad de la mujer, que presentaba heridas de consideración en la cabeza por traumatismos, decidieron trasladarla no al Santa Lucía, que era el hospital más cercano, sino al Virgen de la Arrixaca. Fue llevada primero a Cuidados Intensivos y, de ahí, al quirófano. La mujer sigue, a día de hoy, ingresada en el hospital murciano.