Los vehículos que quieran desplazarse desde el casco urbano de Totana en dirección a Lébor Alto deben hacerlo desde la carretera N-340 a través de la carretera RM-D22 de El Raiguero. Los conductores que quieran seguir este itinerario encontrarán cortada la N-340 a la altura de la fábrica de embutidos Escamusa.

En un comunicado, el Ayuntamiento de Totana ha señalado que esta decisión técnica ha sido adoptada siguiendo las recomendaciones de la Guardia Civil con el fin de controlar la movilidad de vehículos durante la fase 1 en esta zona, y facilitar el acceso y seguridad a las flotas de empresas de camiones que se concentran en Lébor Alto.

Por su parte, los vecinos que residan en Lébor Alto sí pueden dirigirse a Totana por la N-340, pues la rotonda que regula la comunicación rodada en dirección a la ciudad y autovía está abierta al tráfico. Por el contrario, los que se dirijan desde Totana a Lébor, deben hacerlo por la RM-D22, que desemboca de nuevo en la N-340 al pasar la rambla de Lébor.

Desde el ayuntamiento se recuerda que las decisiones de cierre y accesos de entrada y salida al casco urbano de Totana son "exclusivamente" técnicas, motivadas por una situación "extraordinaria" y adoptadas por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.

Por ello, ha rogado la colaboración y "comprensión" ciudadana, así como que se prevea esta situación a partir de este lunes, coincidiendo con el comienzo de la semana laboral.

Por otra parte, el alcalde de Totana, Juan José Cánovas, ha pedido responsabilidad al PP ante la "grave" situación que vive el municipio, con casi 100 positivos por Covid-19 en cuatro días y una persona ingresada en la UCI, "debatiéndose entre la vida y la muerte".

Para Cánovas, lo "mínimo" es mantener lealtad como el alcalde y el Gobierno local hacen con el Ejecutivo autonómico o el Ministerio del Interior.