El Ayuntamientos de Los Alcázares y todas las plataformas surgidas en los últimos años en apoyo al Mar Menor han suscrito un acuerdo para conseguir que la laguna salada llegue a tener personalidad jurídica. El pleno del Consistorio ha aprobado la propuesta para solicitar la iniciativa legislativa con el fin de dotar de personalidad jurídica al Mar Menor y su cuenca, además de conseguir su reconocimiento como sujeto de derechos.

Tras el acuerdo municipal, será el turno de la Asamblea Regional.

La figura de la personalidad jurídica nace del reconocimiento del valor ecológico propio del ecosistema del Mar Menor y de la necesidad de protegerlo y hacer valer su derechos propios a existir, a la reparación del daño causado y a poder desarrollarse según su propia estructura natural.

La sesión extraordinaria estuvo arropada por decenas de personas de la denominada Asamblea Mar Menor, una agrupación de ciudadanos y plataformas que luchan desde hace mucho tiempo para proteger a la laguna. Entre los colectivos hay muchas formaciones conocidas, como Pacto por el Mar Menor, Greenpeace, Banderas Negras o personas independientes, como catedráticos, investigadores, un premio Nobel y cargos políticos.

Entre ellas se encuentra Teresa Vicente, profesora titular de Filosofía del Derecho en la Universidad de Murcia e investigadora especializada en Justicia ecológica y los derechos ecológicos, encargada de redactar la proposición de ley incluida en la iniciativa legislativa popular aprobada ayer. Vicente explicó que «el diagnóstico del estado ecológico del Mar Menor es el de una agonía en peligro inminente de colapso, comprometiendo sus valores naturales, paisajísticos, turísticos, culturales y espirituales y la solidaridad para las generaciones futuras». La proposición de Ley recoge el reconocimiento de que «la laguna Mar Menor y su cuenca comprenden un ecosistema del que dependen miles de personas, además de su riqueza cultural y territorial».