El verano es una época complicada para el control de los incendios fortuitos en zonas forestales. Estos incidentes alteran la vegetación arbórea y arbustiva, afectan gravemente a la fauna y suponen un peligro permanente para otros valores ambientales situados en las inmediaciones.

Además de poner en riesgo a aquellas personas que participan en su extinción y un perjuicio económico tanto por los medios que se desplazan a sofocarlos como por el valor de los bienes que desaparecen bajo las llamas.

Con la intención de evitar posibles accidentes, la Comunidad Autónoma ha puesto en marcha un dispositivo para la prevención de incendios en zonas de ríos y ramblas de la Región, dadas las especiales condiciones meteorológicas y el combustible muerto existente.

Se trata de un dispositivo especial de custodia que recibe el nombre de Thader y está formado por 32 agentes medioambientales y brigadas de intervención rápida, equipados con un vehículo ligero con cisterna de 400 a 800 litros de capacidad. Operan en el entornode los cauces de los ríos Segura, Argos y Mula y las ramblas de la Comarca de Mula-Bullas, incluido el Salto del Usero y Fuente Caputa, que son los ecosistemas con mayor incidencia en el número de incendios. Además, los profesionales también se encargan de proporcionar información a los usuarios que frecuentes las zonas mencionadas para evitar conductas irresponsables. Desde la Comunidad alertan que este verano puede ser especialmente complicado por la abundante vegetación existente, propiciada por altas precipitaciones de este año meteorológico, «hecho que no es habitual en la Región».