Dos pasos importantes se dieron ayer en la protección del Mar Menor. La Junta de Gobierno de la Confederación Hidrográfica del Segura aprobó declarar el acuífero cuaternario de Cartagena en riesgo de no alcanzar el buen estado cuantitativo o químico y una serie de medidas cautelares que implican limitaciones en el uso de nitratos en los campos agrícolas en torno al Mar Menor y un plan de monitoreo y control para constatar el cumplimiento de esta normativa. Unas medidas «de urgencia» que corresponderá a la Comunidad aplicarlas, tal y como señala la CHS.

Estos acuerdos salieron adelante con el apoyo de los representantes de la CHS, el Ministerio para la Transición Ecológica y los gobiernos valencianos y manchegos. Enfrente tuvieron a la Comunidad y las comunidades de regantes, quienes antes de la reunión intentaron sin éxito frenar la votación de tres puntos del orden del día de la junta por «irregularidades». La Comunidad señala que no se oponía a la aprobación de la declaración del acuífero en riesgo químico o cuantitativo. Sin embargo, el cambio en las hectáreas del perímetro afectado por la declaración y que este no se haya comunicado a las personas afectadas, como señala un informe de los servicios jurídicos de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente, llevaron a los representantes de la Comunidad a no votar en este punto.

La CHS alega que en el momento de exposición pública del estudio sobre el estado de la masa de agua del acuífero, el Instituto Geológico y Minero de España (IGME) publicó otro informe que señalaba que el área superficial del acuífero era mayor, y que incluía 3.000 hectáreas que, en opinión del organismo de cuenca, debían reflejarse en la declaración final. Ante la protesta de la Comunidad y los regantes la Confederación resolvió volver al perímetro inicial (43.000 hectáreas), algo en lo que también estaba en contra la Comunidad, que pedía volver a someter a exposición pública la declaración del acuífero con el nuevo perímetro establecido por el IGME.

El punto 4, con las medidas que reflejan limitaciones para el uso de fertilizantes y que lleva suscitando polémica desde el martes al considerar el Gobierno regional que solapa y no respeta los acuerdos alcanzados para el nuevo texto de la Ley de Protección Integral del Mar Menor, también salió adelante.

Con esta aprobación la CHS, para proteger la calidad del agua del acuífero, establece la imposibilidad utilizar abonos orgánicos e inorgánicos en la zona cero (1.190 ha), la más próxima al Mar Menor y la más vulnerable a la contaminación por nitratos. También la posibilidad de permutar superficies de riego a otras más alejadas de la ribera del Mar Menor. En la zona A2, la más extensa y que recoge casi todo el Campo de Cartagena, plantea limitaciones en las dosis de fertilizantes, monitorización del uso del agua de riego, de la fertilización mineral o limitaciones a los caudales máximos y tiempos de riego.

La Comunidad volvió a no estar de acuerdo en este punto, no votó, y alegó que ya existen normativas regionales que controlan la contaminación por nitratos.

Ministerio: "La CHS puede tomar medidas cautelares"

El Ministerio para la Transición Ecológica señala que la declaración de riesgo químico del acuífero supone la activación de los trámites para que la Confederación Hidrográfica del Segura elabore un plan de ordenación de esta masa de agua, que vierte sus aguas directamente Mar Menor. Mientras se desarrolla el plan, «el organismo de cuenca está habilitado para adoptar medidas cautelares en tanto se aprueba el programa de actuación», señala el Ministerio.