La Guardia Civil destruyó durante el pasado año un total de 86.566 armas, entre las cuales 3.493 procedían de la Región de Murcia y de éstas más de 2.000 eran armas largas y 852, cortas, ha informado este jueves en un comunicado el instituto armado.

Algunas de ellas están implicadas en ilícitos penales o administrativos y tras el correspondiente procedimiento se determinan su destrucción; y otras, que por cesar sus titulares en el derecho a la tenencia y uso y no haber sido adjudicadas en subastas, tienen el mismo fin, lo que permite que las armas sean reducidas a chatarra mediante un proceso de fundición o similar.

Estas actuaciones se enmarcan en la normativa vigente en España y se suma al Programa de Acción de Naciones Unidas sobre el comercio ilícito de armas pequeñas y ligeras, que tuvo su origen en la Conferencia Internacional de las Naciones Unidas sobre el Comercio Ilícito de Armas Pequeñas y Ligeras celebrada en Julio de 2001.