Las trece personas que llegaban hoy a las costas de la Región en patera siguen en el puerto de Cartagena y previsiblemente harán noche ahí, puesto que aún no se les ha hecho la prueba PCR que arroje luz sobre si tienen o no tienen coronavirus.

Si finalmente estos migrantes duermen en el puerto, donde fueron llevados esta mañana, la Policía Nacional tendrá que custodiarlos toda la noche, con el fin de evitar que alguno se vaya. Más aún, sin tener los resultados sobre su estado de salud. La Benemérita se encarga de rescatar en el mar a las personas que viajan en patera, pero una vez en tierra, las competencias de Extranjería son exclusivamente de la Policía Nacional. Agentes de este Cuerpo aguardaban en el puerto de Santa Lucía, donde trasladaron a los llegados hoy. Y donde continúan a esta hora. Hay que recordar que el CIE de Sangonera, a día de hoy, sigue cerrado.

Y es que el protocolo exige que a estas personas se les ha de hacer la prueba del coronavirus, antes de ser llevadas a ninguna parte. Desde la Consejería de Salud insisten en que el resultado de la prueba no es inmediato. "La Delegación del Gobierno dispone de 72 horas para identificar a las personas que llegan en patera. Una vez hecho, se realiza la PCR a todos ellos y se ingresa en un centro hospitalario a los positivos, si los hay", indicaban desde el departamento que dirige Manuel Villegas.

Puesto que vecinos de poblaciones como Murcia y Los Nietos han expresado su descontento ante la presencia de pisos con migrantes en sus localidades, llegando a insultar a los extranjeros con epítetos como "perros", "hijos de puta" y "maricones", se planteó El Valle como lugar para acoger a estas personas. En este sitio se llevó, durante el confinamiento, a gente sin hogar.

"Cuando dan negativo, pero han estado en contacto con un positivo, ahora, para guardar la cuarentena, se les llevará a un centro de la Comunidad", confirmaban este martes desde la Delegación del Gobierno en Murcia. En el caso de que en la patera llegada hoy no haya ninguna persona infectada, quedarán los trece a cargo de organizaciones humanitarias, que les buscarían un piso en el que residir.

Un total de 108 inmigrantes llegaron a finales de junio en 10 pateras a Cartagena, ocho de los cuales dieron positivo a la prueba PCR, por lo que fueron trasladados al Santa Lucía, mientras que sus contactos estrechos se pusieron en cuarentena, así como el resto de inmigrantes por precaución.

Policías denuncian la "nefasta gestión"

Policías nacionales de la Región consultados por este diario coinciden en denunciar "la nefasta gestión" que hay a la hora de trabajar con los llegados por mar, ya que "no hay un protocolo definido para la gestión de las pateras, por lo que los servicios se prestan a base de improvisaciones y sin las medidas de seguridad adecuadas para evitar posibles contagios de enfermedades infeccio-contagiosas".

Y es que "carecemos de los medios materiales necesarios para estos casos, por lo que no se pueden cumplir los protocolos existentes en la Dirección General de la Policía en prevención de riesgos laborales, así como llevar a cabo los servicios con garantía", hacen hincapié.

Los agentes subrayan que "es de urgente necesidad habilitar un centro de atención temporal de extranjeros (CATE)" en Cartagena, que sería "una zona en el puerto de llegada, donde estas personas serían atendidas de todos los trámites de extranjería correspondientes, así como de atención médica, estableciendo una custodia policial en la propia zona de llegada a puerto sin poner en riesgo a los funcionarios encargados de ese servicio, no colapsando otros servicios policiales y dando un trato adecuando a la situación" de estos extranjeros.

"Este centro solo existiría para este tipo de casos, siendo una medida mucho mas adecuada que los traslados a los calabozos existentes en las comisarías, que como se ha dicho anteriormente en la mayoría de ocasiones se encuentran abarrotados con esta problemática que conlleva y la alteración del normal funcionamiento de una comisaría", explican.

Y es que "es imprudente montar custodias policiales de estas personas en el propio puerto sin las medidas de seguridad y protección para los funcionarios policiales y los inmigrantes", a lo que añaden que, en las últimas pateras, "se ha tenido que establecer custodia policial debajo de un tejadillo en el propio puerto porque no se sabía que hacer con las personas contagiadas o con el resto de acompañantes, que no sabíamos si estaban incubando el virus".

"En estos momentos de pandemia mundial que estamos viviendo, se deben tomar todas la medidas de prevención y reacción ante estos casos, por ello necesitamos todos los medios necesarios, ademas de la colaboración de otras administraciones regionales y locales", destacan, al tiempo que recalcan que "desde hace años la ciudad de Cartagena se ha convertido en la puerta de entrada a la inmigración ilegal de personas llegadas en pateras desde el norte de Africa, colapsando en numerosas ocasiones todos los medios humanos y materiales que dispone la Policía Nacional de toda la Región".