La crisis del Mar Menor ha alcanzado ya tintes de argumento cinematográfico para algunos representantes políticos manchegos. El diputado regional y vocal de los municipios ribereños del Tajo en la Comisión de Exploración del Trasvase, Francisco Pérez, ha mostrado su malestar por «la enésima salida de tono» de un parlamentario regional del PP, Jesús Cano, al que ha instado a «defender y cuidar» el Mar Menor, en lugar de quejarse por los cambios en la regulación del Acueducto anunciados por el Ministerio.
Francisco Pérez ha expresado el malestar de los ribereños con los dirigentes de la Región de Murcia por estar «más preocupados de defender los oscuros intereses privados de los grandes regantes que del pequeño agricultor o de los vecinos del Mar Menor».
El parlamentario apuntó que «llega un momento que uno lee la actualidad de la Región de Murcia y cree estar ante un avance de la última de Scorsese o más bien de una parodia, porque desde fuera no cabe en cabeza humana que, con todo lo que ha sucedido este año en torno al Mar Menor, su Gobierno siga defendiendo los intereses de la agroindustria y se le siga comprando el discurso sin rechistar».
El parlamentario manchego añadió que «sería gracioso, si no jugasen con el patrimonio de todos los españoles y la vida de cientos de miles de personas, que necesitamos del agua del Tajo para sobrevivir; agua que debería estar garantizada preferentemente para cualquier uso, incluido el recreativo, por ser la cuenca cedente», reclamó.
«Tiene sorna que después de la nueva humillación que hemos sufrido los ribereños por parte del Ministerio todavía quieran seguir llorando como si hubieran sido ellos los perjudicados con un cambio de normas absolutamente estéril para nuestros intereses y los del río Tajo», apuntó Pérez.
A su juicio, «están acostumbrados a decidir sobre nuestra agua, llegando a estipular cuáles deberían ser nuestras necesidades, pero el saco se ha roto por donde menos esperaban: su Mar Menor está podrido por culpa de la agroindustria Y, lejos de asumir las culpas, se han embarcado en una odisea para culpar a un Gobierno, el del presidente Sánchez, que, lejos de enfrentarse y defender los intereses de los españoles, se muestra manso y colaboracionista a través del Ministerio de Transición Ecológica, a la Confederación Hidrográfica del Tajo o al socialista Diego Conesa», zanjó.
También la presidenta de la Asociación de Municipios Ribereños, María de los Ángeles Sierra, se inspira en los títulos de cine: «Que les juzgue la historia», concluyó.
