El expresidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) José Salvador Fuentes Zorita ha dicho este jueves al declarar como testigo en la pieza separada del caso de la desalinizadora de Escombreras que investiga al expresidente de Murcia Ramón Luis Valcárcel que construir esa planta no era necesario.

Ha explicado durante el interrogatorio que desde el primer momento se opuso a la ejecución de este proyecto respaldado por la comunidad autónoma, como declaró en la comisión que se creó en 2016 en la Asamblea Regional de Murcia.

Para este testigo, la creación del Ente Público del Agua (EPA) por el Gobierno autonómico fue una forma de tratar de burlar la Ley de Aguas, especialmente en lo relativo a la necesidad de contar con los informes preceptivos de la CHS para la puesta en marcha de nuevos desarrollos urbanísticos.

Según Fuentes Zorita, el Programa Agua, impulsado por la entonces ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, trató de paliar la falta de recursos hídricos existente en la cuenca del Segura.

Estas manifestaciones contrastan con lo manifestado el pasado viernes por Valcárcel al declarar como investigado como presunto autor de los delitos de prevaricación, malversación, fraude y fraude de subvenciones en la construcción y explotación de esa planta en Cartagena, ya que afirmó que era necesaria por el déficit hídrico estructural de 471 hectómetros cúbicos que padece la región.

Y añadió que la producción total de esa planta junto con las dos de San Pedro del Pinatar, la de Valdelentisco (Cartagena) y la de Torrevieja (Alicante) era insuficiente para cubrirlo.

Tras la ronda de declaración de testigos celebrada este jueves y el martes pasado se abre un paréntesis para que las partes personadas en estas actuaciones puedan proponer la práctica de otras pruebas.