Parece complejo llegar a tener una acalorada discusión cuando se está de acuerdo, pero la Asamblea Regional siempre se guarda un as en la manga. Ayer se aprobaban dos propuestas de ley socialistas con el voto a favor, además del PSOE, de Ciudadanos y el Partido Popular. Sin embargo, el debate en la Cámara no estuvo exento de duros reproches mutuos sobre la falta de diálogo.
El primer texto, la proposición de ley por la que se regula el reconocimiento de la condición de familia monoparental en la Región de Murcia, será tramitada en la Asamblea tras haber recibido el apoyo de todos los grupos políticos excepto un único voto en contra del ahora único diputado de Vox, Pascual Salvador.
La norma pretende servir de salvavidas para 60.000 familias monoparentales murcianas, según explicó en su intervención la diputada Gloria Alarcón. Sin embargo, el texto fue tachado de «poco ambicioso» y contener «graves deficiencias» por todos los grupos. Una de las principales críticas es que se considere familia monoparental especial a partir del tercer hijo y no del segundo.
El PP afeó al portavoz del PSOE, Diego Conesa, que llevaran a la Asamblea una ley de la legislatura pasada. Además, la diputada popular Maruja Pelegrín le reprochó que fuera de «víctima» cuando no tiene «voluntad de pacto» y «tiene secuestrado a su grupo parlamentario». Conesa, con permiso del presidente de la Cámara, Alberto Castillo, respondió afirmando que la voluntad de acuerdo de PP y Cs está «muy alejada» por el rechazo previo a sus propuestas en el primer año de legislatura y por su «falta de respeto» con su negativa previa a negociar sus iniciativas. Esta intervención originó entonces la petición de amparo del portavoz del PP, Joaquín Segado, quien lamentó que Castillo haya permitido responder a Conesa introduciendo declaraciones que, en su opinión, «no se ajustaban a lo reflejado en el reglamento».
Desde Ciudadanos tacharon el texto de «restrictivo» en comparación con la Ley Integral de Protección y Apoyo a las Familias que el pasado 14 de febrero fue aprovada en el Congreso de los Diputados.
Deducciones IRPF
Por otro lado, todos los grupos, salvo Vox, apoyaron tramitar la modificación de las leyes de tributos cedidos para incorporar deducciones autonómicas en el lRPF en la compra de instalaciones para la producción de energía eléctrica renovable para autoconsumo en el domicilio habitual y por la adquisición de vehículo eléctrico. El importe deducible será como máximo de entre el 30 y al 50% del importe de la cantidad invertida, sin que el importe de la deducción pueda superar los 7.000 euros.
