Este domingo Satse enviaba a los medios una nota de prensa en la que indicaba que un 13,7 por ciento de enfermeras y enfermeros han sufrido la Covid-19 en Murcia, según la encuesta difundida por el sindicato, que concluye que estos profesionales ponen de nota un 3,6 sobre diez a la gestión de la Consejería a la hora de solucionar sus problemas durante la crisis sanitaria. También suspenden con un 3,1 sobre 10 la cantidad y calidad del material de protección que han tenido a su disposición, viéndose obligados siete de cada diez a reutilizar las mascarillas FPP-2 o FPP-3 para atender a pacientes y ciudadanos.
Estos resultados proceden del análisis que la empresa especializada en estudios online Sondea ha elaborado para el Sindicato de Enfermería, SATSE, tras realizar una encuesta a finales de mayo y principios de junio a un total de 8.218 enfermeras y enfermeros del conjunto del Estado sobre su situación y condiciones de trabajo en la actual crisis sanitaria de la Covid-19.
Sin embargo, la Comunidad no tardó en reaccionar, afirmando que Satse "altera" la puntuación con la que los enfermeros valoran la gestión de la crisis de la Covid-19 por parte del Gobierno de la Región de Murcia, "que es calificada con la mejor puntuación de España". Concretamente, y según esta encuesta, dan a la Región un 5,65. La información de la encuesta que ha hecho pública hoy el Sindicato de Enfermería Satse procede, aseguran desde la Consejería de Salud, de una publicación que hizo en abril el Consejo General de Enfermería.
La alta afectación de la enfermedad dentro del colectivo enfermero, la falta de suficiente material y equipos de protección, así como de pruebas diagnósticas de la Covid-19, y las graves consecuencias que su lucha contra la enfermedad ha supuesto nivel personal y familiar son algunas de las principales conclusiones del estudio y que, a juicio de SATSE, refrendan las sucesivas y reiteradas denuncias que desde la organización sindical se han realizado tanto a nivel nacional como internacional.
En lo que respecta a Murcia, el estudio señala que cerca de nueve de cada diez profesionales de Enfermería encuestados han trabajado durante la crisis sanitaria (89,2%) y que ocho de cada diez han tenido contacto con pacientes diagnosticados o sospechosos de coronavirus (85,5%). De los enfermeros y enfermeras encuestados/as, un 13,7 por ciento aseguran haber tenido síntomas de la enfermedad.
En este sentido, desde la Comunidad informan de que, según los datos recabados por el servicio de Epidemiología, han resultado positivos por Covid 140 profesionales de enfermería de un total de 10.000, aproximadamente. "Esto supondría un 1,4 por ciento y no un 14 por ciento, como asegura el sindicato Satse", sentencian.
Por esto, desde la Salud recuerdan que los únicos datos oficiales son los que proporciona el Servicio de Epidemiología de la Consejería.
Un 17,7% de las enfermeras han realizado alguna denuncia
En cuanto a las pruebas de detección de la enfermedad, fueron realizadas al 91,1 por ciento de las enfermeras y enfermeros de la comunidad autónoma. El análisis apunta que a un 32,7 por ciento les han hecho pruebas PCRs, a un 83,2 por ciento, test rápidos, y a un 11,5 por ciento le realizaron estudios serológicos.
En lo que respecta a la protección con la que han contado para realizar su trabajo, la cantidad y calidad del material disponible ha sido valorado por los profesionales durante las peores semanas de la pandemia con 3,1 puntos sobre 10, siendo muy mal puntuada (de 0 a 4) por el 69,4%. Ahora sigue siendo percibida con una media de 4,8, y es suspendida por un 41,1% de los profesionales encuestados.
Asimismo, siete de cada diez enfermeras y enfermeros consideran que necesitarían más información y formación sobre el manejo de los EPIs (74,2%), y un 35,8 por ciento declara no haber recibido ningún tipo de información y formación al respecto.
El material que más han tenido que reutilizar las enfermeras/os ha sido la mascarilla FPP-2 o FPP-3, en concreto, un 71,8% de los profesionales encuestados. Por otra parte, un 71 por ciento han reutilizado mascarillas quirúrgicas y un 40,3 por ciento batas impermeables, mientras que un 15,3 por ciento tuvieron que reutilizar trajes de buzo de los de un solo uso.
El estudio realizado también concluye que un 17,7% de las enfermeras/os de la comunidad autónoma han realizado alguna denuncia, escrito de queja o similar respecto a las circunstancias de seguridad existentes en las semanas de crisis sanitaria.
Asimismo, la pandemia de la Covid-19 ha afectado a la estabilidad del puesto de trabajo al 16,9 por ciento de las enfermeras y enfermeros encuestados, y un 13,6% de las enfermeras/os han necesitado ayuda psicológica por la sobrecarga laboral y duras condiciones que han tenido que soportar (estrés, ansiedad, contacto permanente con el dolor y, en muchas ocasiones, la muerte...), según el estudio realizado por la empresa Sondea.
"Las conclusiones del estudio no dejan lugar a dudas de que la falta de previsión y diligencia de las autoridades competentes ha puesto en grave riesgo a la salud y seguridad de las enfermeras y enfermeros, así como la de las personas de su entorno", subraya SATSE, que insiste en que "todos los problemas, errores y deficiencias constatadas no pueden volver a producirse en caso de nuevos rebrotes de la enfermedad, porque sería una falta de respeto a la dignidad de los ciudadanos y de los profesionales".
